Alinear las necesidades de salud de la población con las necesidades de las empresas del sector farmacéutico y biotecnológico será uno de los grandes retos de la industria en las próximas décadas. Así lo expone Más Madrid en su Plan Reindustria, un documento que ha vuelto a sacar a relucir en su Jornada sobre Geopolítica e Industria Madrileña.
Durante el encuentro, la formación ha presentado sus propuestas incluidas en el plan a representantes del tejido industrial a nivel regional. En concreto, la jornada ha congregado a representantes de las industrias farmacéutica, alimentaria y automovilística, además de asociaciones de consumidores y sindicatos.

En este sentido, el partido recuerda que, tanto a nivel europeo como nacional, la pandemia de COVID-19 y el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia (PRTR) diseñado para hacer frente a las consecuencias de la crisis sanitaria, han supuesto “un salto cualitativo y cambio de paradigma en cuanto al papel que se le otorga a la industria en la economía”. Mientras, el Gobierno de la Comunidad de Madrid aprobó en 2020 su Plan Industrial 2020-2025. Sin embargo, Más Madrid apunta que está siendo “pobre” y ha sido objeto de “crítica” por parte de los sindicatos y la oposición en la Asamblea.
Por ello, desde Más Madrid han propuesto diferentes iniciativas para “impulsar una política industrial verde” en la región, destacando el impulso de polos industriales, como el farmacéutico. “A pesar de contar con unanimidad en la cámara aún no ha sido tomado en consideración por el Gobierno”, señalan.
Polo industrial Farmanorte
La falta de inversión en la investigación de tratamientos sobre enfermedades raras (EERR) o de nuevos antibióticos para hacer frente a las resistencias antimicrobianas son algunos “fallos” del mercado, ya que no se generan los “incentivos correctos” para impulsar la investigación en múltiples campos que impactan en la salud y bienestar de la población.
De este modo, mediante polos industriales, Más Madrid pretende “fomentar la innovación y el crecimiento económico a través de una estrecha colaboración entre el sector público y el sector privado, con una visión a largo plazo y un fuerte enfoque en la creación de empleo y el desarrollo”. En total, el Plan Reindustria describe siete polos industriales y, el primero de ellos, el polo industrial Farmanorte, que prevé movilizar una inversión total de 850 millones de euros (370 millones de inversión pública y 490 millones de inversión privada) en cuatro años, según estimaciones de la formación.
El objetivo de Farmanorte es alinear las necesidades de generación de conocimiento en el ámbito biomédico con las necesidades de la población, los objetivos de las instituciones y las necesidades del ecosistema de empresas del sector farmacéutico y biotecnológico. Y es que, expone la formación, la industria farmacéutica “tiene un rol central en nuestra sociedad por su impacto directo sobre la salud de la población”.
Más Madrid destaca que, a pesar de que la cifra de negocio de la industria farmacéutica solo representa el 2,3% del total de la industria española, ésta es “líder por volumen de inversión en investigación, siendo el sector que más solicitudes de patentes presenta en España”. “A su vez, los medicamentos son el cuarto producto más exportado por nuestro país”, agrega.
Nueve ejes de actuación
El polo industria Farmanorte se compone de un total de 9 ejes de actuación. Unos ejes que Más Madrid quiere desarrollar mediante el diseño de políticas públicas que “catalicen la inversión, la innovación y la colaboración entre todos los agentes implicados”. Una farmacéutica pública madrileña, un hub de I+D+i en EERR o disminuir el impacto ecológico de la investigación, producción y distribución farmacéutica son algunas de las propuestas de la formación.
- I+D biomédica pública: creación de una entidad farmacéutica de titularidad pública en la Comunidad de Madrid que investigue, desarrolle, fabrique y comercialice medicamentos. Esta entidad también ayudará a generar un ecosistema de investigación e innovación farmacéutica sostenible, orientado a responder a las necesidades de salud pública nacionales y globales bajo principios de interés y participación pública, ciencia abierta y transparencia, fomentando una red de pequeñas y medianas compañías biotecnológicas. El objetivo será abordar toda la cadena de valor del medicamento, desde la identificación de necesidades de investigación básica hasta la administración en el cuerpo del paciente.
- Oficina de coordinación de ensayos clínicos y transferencia de conocimiento: desarrollar una normativa específica para que exista un marco regional estable, con agilidad en la asesoría y toma de decisiones en el ámbito de los aspectos éticos de los ensayos clínicos. La intención es crear una oficina de consultoría pública tanto en el ámbito jurídico como en el metodológico y el administrativo de cara a facilitar la realización y desarrollo de ensayos clínicos en nuestra región.
- Producción de medicamentos y otras terapias desarrolladas: uno de los objetivos de este polo es dotarse de infraestructuras públicas y capital tecnológico e industrial suficiente para completar la cadena de desarrollo del medicamento, facilitando la producción dentro de una industria de titularidad pública.
- Creación de un centro tecnológico para PYMES del ámbito biomédico: el desarrollo de innovaciones diagnósticas se presta a poder obtener beneficios de un centro tecnológico para PYMES en el ámbito biomédico. Los desarrollos obtenidos a raíz de esta colaboración tendrían criterios de interés público en el caso de que pudieran ser elegibles para su utilización en el sistema público de salud. El ámbito del desarrollo de innovaciones diagnósticas es uno de los que podría beneficiarse con mayor potencia de la existencia de este centro.
- Gestión de un fondo público de capital semilla: creación de un fondo público de capital semilla que participará en proyectos entre 100.000 euros y un millón de euros desarrollados por empresas o consorcios empresariales consolidados, preferentemente en colaboración con grupos de investigación públicos. Además de utilidad social demostrada, será necesario que los proyectos a financiar sean disruptivos, de tipo alto riesgo, alta recompensa.
- Creación de un hub de investigación, desarrollo e innovación en EERR: la investigación de enfermedades raras o poco frecuentes y su capacidad para recibir fondos no suele alinearse con la capacidad de generar altas rentabilidades. Por ello, se propone crear una línea específica de financiación que, además, coordine investigaciones, sume a personal investigador y dé apoyo en labores de captación de fondos y acumulación de tecnología.
- Línea de atracción de empresas vinculadas a material sanitario y reconversión industrial: creación de una línea de préstamos y ayudas a empresas por importe de 100 millones de euros para estimular la reconversión industrial hacia el sector biomédico y de producción de materias primas con el objetivo de garantizar la soberanía en la elaboración de productos básicos en el ámbito biomédico.
- Transición ecológica de la industria farmacéutica y biotecnológica: desarrollar proyectos de investigación sobre cómo disminuir el impacto ecológico de la investigación, producción y distribución farmacéutica y biotecnológica, así como labores de asesoría para aquellas empresas que quieran ser punteras, optimizando su proceso completo de investigación y producción.
- Reconversión del Zendal: al norte de la ciudad de Madrid se encuentran diferentes infraestructuras tanto de empresas farmacéuticas como de centros universitarios y de investigación. En la actualidad, Más Madrid considera que el Hospital Enfermera Isabel Zendal es un centro infrautilizado que no dispone de los requisitos idóneos para albergar pacientes en régimen de hospitalización y tampoco para dedicarse a actividad de consultas externas. Así, propone que las infraestructuras de las que dispone puedan ser de utilidad para albergar actividades vinculadas a la investigación y el desarrollo de medicamentos, así como todo lo relacionado con acciones de asesoría en el ámbito de los ensayos clínicos, la investigación traslacional o asuntos ligados a los derechos de propiedad intelectual.