El consejero de Salud del Principado de Asturias, Pablo Fernández Muñiz, advierte que “aunque estamos ante un horizonte muy esperanzador, la pandemia aún no ha finalizado”. Y es que el consejero asturiano considera importante recordar que la crisis sanitaria de la COVID-19 no ha acabado porque “en las UCIs de Asturias todavía hay unas 30 personas y en el mundo hay zonas donde ahora se está librando una batalla contra el virus con más víctimas de las que quisiéramos”.

Durante un coloquio online organizado por Executive Forum, con la colaboración de Alexion, Pablo Fernández ha explicado cómo ha gestionado la pandemia su comunidad. La Consejería fue previsora pues, antes del primer caso de coronavirus en Asturias, ya trabajaba en establecer los pilares de actuación ante posibles casos de infección por COVID-19 como medica de anticipación.

Pablo Fernández, consejero de Salud de Asturias

“A finales en enero de 2020 ya contábamos con un protocolo en el servicio de salud del Principado sobre cómo atender a una persona con sospecha de la nueva enfermedad”, ha afirmado Fernández. De este modo, se evitó un “temido colapso” de los servicios de urgencias mediante un sistema en el que, ante una sospecha, se atendía al paciente a domicilio o se le trasladaba en ambulancias preparadas a un centro hospitalario si era preciso.

Salud pública

Uno de los problemas con los que se encontraron en Asturias, al igual que en el resto de España y del mundo, era “una estructura de salud pública muy inferior a la necesaria” para lo que llegó con la pandemia.

“Ya estaba previsto su refuerzo en el Plan de Mejora de Salud para Asturias 2019-2030, pero en absoluto con las dimensiones que ahora eran necesarias para la vigilancia epidemiológica en situación de pandemia o la evaluación de la situación y el establecimiento de medidas necesarias para el control de la transmisión comunitaria”, ha apuntado Fernández.

A pesar de tratarse de una situación nueva, el consejero ha destacado el “compromiso e implicación” de todos en la comunidad. Asimismo, Asturias trabajó de manera coordinada y compartiendo experiencias e información y tomando decisiones en torno al Consejo Interterritorial del SNS.

Atención Primaria

La Atención Primaria (AP) ha sido clave desde el inicio de la pandemia para que Asturias tuviera una mejor respuesta, según el consejero. “Primero con el diagnostico de casos y su seguimiento domiciliario, para después mantener la atención mientras mantenía un equilibrio entre la accesibilidad y la seguridad que dio lugar a diferentes cambios de la atención”, ha indicado.

En todo este tiempo, la AP no ha estado parada, sino “en constante evolución” para responder de la mejor manera posible a las necesidades de cada momento con un objetivo común: ofrecer la mejor calidad asistencial.

“En Asturias contamos con un sistema sanitario público con una estructura robusta que supo adaptarse a cada momento y donde fue clave el plan de contingencia diseñado por el servicio de salud que contempló incluso los escenarios más duros”, ha señalado el consejero. Y es que, según ha destacado, la AP funcionó de manera muy eficaz.

Fernández ha recalcado que, desde el comienzo de la crisis, el Servicio de Salud asturiano ha reforzado el número de profesionales sanitarios, “hasta alcanzar los 20.000 actuales”. Esto supone un aumento del 15 por ciento del número de personas trabajando. Además, también se ha dotado, como el resto de CC.AA, de una reserva estratégica de materiales y equipos de protección individual que aún hoy garantizan hacer frente a los diferentes escenarios.

Enfermedades raras

Leticia Beleta, directora general de la biofarmacéutica Alexion para España y Portugal, ha hecho especial mención durante el coloquio a la implicación activa del Servicio Asturiano de Salud con las enfermedades raras. Y es que estas se incluyen en algunas iniciativas importantes como el Plan de Salud 2019-2030, el Observatorio de la Salud (OBSA), el Sistema de Información de Enfermedades Raras (SIERA) que existe en Asturias desde 2013, o la implementación de líneas estratégicas del Sistema Nacional de Salud de Enfermedades Raras.

Así, Beleta ha querido reconocer esos esfuerzos. “Esperamos ver nuevas iniciativas en el futuro”, ha afirmado. Además, ha reiterado el compromiso de Alexion con la Consejería de Sanidad asturiana para lograrlo, ya que “aún existen importantes necesidades de los pacientes que viven con una enfermedad rara y que requieren el apoyo de las autoridades sanitarias”. 


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