Con la presentación de la nueva Oficina de Ciencia y Tecnología (Oficina C) y los primeros informes que ha elaborado, se ha inaugurado este 14 de noviembre la Semana de la Ciencia en el Congreso de los Diputados. Según la presidenta de la Cámara Baja, Meritxell Batet, se trata de “una iniciativa de gran valor para nuestro Parlamento, que va a permitir aunar ciencia y política en beneficio de todos”.
La oficina C se ideó bajo la presidencia de Ana Pastor, actualmente vicepresidenta segunda del Congreso. Fue en 2019 cuando se acordó su creación y en 2021 cuando tomó forma y empezó a funcionar. En su momento se propusieron 17 temas a abordar, de los que finalmente se eligieron cuatro prioritarios para que la Oficina C comenzara su andadura. Así, este 2022 han visto la luz los informes relativos a los avances en el tratamiento del cáncer, la inteligencia artificial y salud, el hidrógeno verde y la ciberseguridad.
Asesoramiento científico
La creación de la Oficina C tiene por objeto “prestar asesoramiento en terrenos altamente complejos y especializados y servir de puente entre la ciencia y el Parlamento, pues aún queda camino por recorrer para lograr la implicación entre ambos mundos”, ha apuntado Alfonso Cuenca, director de Estudios, Análisis y Publicaciones del Congreso durante su comparecencia en la Cámara.
Para su creación, ha explicado Cuenca, se optó por un “modelo mixto”: “En marzo de 2021 se constituyó la Oficina de Ciencia en el Congreso mediante convenio suscrito con la Fundación Española para la Ciencia y la Tecnología (FECYT), constituido por los principales organismos de investigación de nuestro país”, ha indicado.
La función de la oficina es la elaboración de informes breves que recojan la evidencia científica sobre temas de interés para el Parlamento “desde la máxima objetividad y transparencia” y FECYT se encargará de dotar a la Cámara de esa evidencia científica necesaria para contribuir a la toma de decisiones. “La misión en la que está inmerso el Parlamento requiere dotarle de los mejores instrumentos para realizar su labor con el asesoramiento científico“, ha destacado Cuenca.
“Trabajamos de la mano del Consejo Asesor -nos hemos reunido casi 12 veces este año-, que nos ayuda a identificar temas de tendencia, importantes para la comunidad científica y para la sociedad”, ha añadido Ana Elorza, coordinadora científica de FECYT. En este sentido, ha aclarado que los informes elaborados por la Oficina C no tienen recomendaciones, sino que únicamente “exponen y contextualizan lo que está pasando en cada temática”. “Pensamos que está bien partir de esa evidencia para poder trabajar y pensar las políticas”, ha concluido Elorza.
Líneas de trabajo
Por su parte, Izaskun Lacunza, líder de la Unidad de Proyectos Internacionales de FECYT, ha expuesto las seis líneas de trabajo fundamentales de la Oficina C:
- Evidencia: elaborar informes de interés para la Cámara con evidencia científica.
- Método: diseñar y evaluar el protocolo de trabajo para la elaboración de informes.
- Conexión: organizar programas y actividades para poner en contacto a la comunidad científica y la sociedad con los diputados.
- Sensibilización: que la comunidad científica explore carreras en el asesoramiento científico.
- Internacional: participar de manera activa en los distintos foros europeos e internacionales.
- Comunicación: realizar actividades de comunicación, divulgación y difusión.
“Por primera vez contamos con un instrumento eficaz de asesoramiento científico”, ha celebrado Batet. “La Oficina C va a contribuir a enriquecer nuestros debates en sede parlamentaria, no solo a través de los informes que irá elaborando, sino también a través del programa de emparejamiento entre diputados y científicos”, ha concluido la presidenta del Congreso.