España ve con buenos ojos y estudia apoyar la creación de una Cartilla Europea de Vacunación (CEV). Así se lo ha trasladado el Ministerio de Sanidad al grupo parlamentario de Ciudadanos y así lo confirmó Salvador Illa en última comparecencia ante el Congreso.
La Cartilla Europea de Vacunación hizo su aparición en el contexto comunitario durante el pasado periodo legislativo Según la Comisión Europea, ayudaría a los Estados miembro a mejorar su gestión administrativa hacia un modelo digital. Asimismo, contribuiría a mejorar la cooperación transfronteriza y, al mismo tiempo, a mejorar la prevención de las enfermedades infecciosas.
La Covid-19 ha vuelto a situar en la palestra esta iniciativa. No sólo ante el aumento de la reticencia a la vacunación o la insuficiente preparación que los sistemas sanitarios europeos han mostrado ante esta pandemia. Ahora que Europa afronta su desescalada, ésta puede ser una herramienta trascendental, según Ciudadanos. «Vamos a tener que estar muy coordinados si queremos volver a viajar con normalidad», aseguró en la Cámara Baja su portavoz de Sanidad, Guillermo Díaz.
La iniciativa de Ciudadanos
Precisamente, el pasado 28 de abril el grupo parlamentario de Ciudadanos solicitó al nuevo equipo de la Comisión Europea que ponga en marcha la Cartilla Europea de Vacunación. La necesidad de abordarla venía respaldada también, recordaba Ciudadanas, por el Centro Europeo para la Prevención y el Control de Enfermedades.
Los beneficios de impulsar una Cartilla Europea de Vacunación serían múltiples. Ayudaría a combatir las enfermedades prevenibles mediante vacunación e impulsaría la salud preventiva. Además, registrar digitalmente información personal y poblacional sobre la vacunación mejoraría el funcionamiento de los programas vacunales. Al mismo tiempo, se difundiría información documentada sobre la vacunación en Europa, lo que redundaría en una mejora de las pautas de vacunación.
Por último, una Cartilla Europea de Vacunación, comentaba Ciudadanos, reforzaría los sistemas sanitarios nacionales y ayudaría a los responsables políticos a fomentar la vacunación. «Es un gran paso para coordinar las necesidades de los Estados miembro«, resumía el grupo.
Las claves de la acción europea
Bajo la justificación de que los virus no respetan las fronteras, la acción europea propuesta por Ciudadanos supondría también una oportunidad para recopilar y homogeneizar datos. Éstas son sus tres claves:
- Emisión de la cartilla. El ECDC coordinaría la creación y emisión de la Cartilla Europea de Vacunación y las autoridades nacionales la facilitarían a sus ciudadanos. La cartilla debería recoger de forma informática el registro de vacunas que ese ciudadano ya ha tomado, así como información sobre el calendario de vacunación que le corresponda de acuerdo al lugar en el que vive hasta que haya un calendario único de vacunación efectivo.
- Utilización de la cartilla. Los sistemas sanitarios nacionales remitirían al ECDC información en línea con la legislación vigente sobre privacidad y protección de datos. El ciudadano no notaría la diferencia ni ningún requisito adicional respecto a su cartilla de vacunación actual.
- Beneficios de la cartilla. Gracias a la información recabada, la CEV permitiría tener una perspectiva general de la situación de inmunización a nivel europeo. Esto permitiría al ECDC detectar posibles problemas de cobertura y establecer programas específicos para colectivos vulnerables.