Mayor importancia de la red de farmacias en el Sistema Nacional de Salud (SNS) en el ámbito digital. Esta es la petición sobre la que pivota una Proposición No de Ley (PNL) presentada por el Grupo Popular en el Congreso de los Diputados, para su debate en la Comisión de Sanidad. Según desprende el texto de la iniciativa, resulta imprescindible incluir en la Cartera de Servicios Comunes del SNS los diversos servicios digitales farmacéuticos de cara a una mayor implicación de las oficinas “en la asistencia, atención sanitaria y en el apoyo a las prestaciones en salud pública”.
La formación apunta a un triple objetivo como resultado de esta determinación. El primero es la mejora de la atención farmacéutica, el acceso al medicamento y los productos sanitarios, y la farmacovigilancia. El segundo, la promoción del uso racional de los medicamentos y el control de la adherencia a los tratamientos. En última instancia se sitúa el impulso de la teleasistencia farmacéutica en beneficio de población vulnerables, pacientes crónicos o de zonas rurales.
Contar con la farmacia comunitaria en la creación del ‘data lake’ sanitario nacional, entre las demandas
Además, la PNL popular insta al Gobierno a contar con la red de farmacias comunitarias y con entidades distribución de medicamentos y productos sanitarios en la creación de un espacio nacional de datos sanitarios, coordinado entre el Ministerio de Sanidad y las CC. AA.
Precisamente la proposición pide colaborar con los autoridades autonómica para impulsar las medidas para crear un sistema de alertas nacional. En él el personal sanitario, incluidos los farmacéuticos y empresas de distribución, podría verter datos para detección de posibles amenazas sanitarias en beneficio de la salud pública.
Estrategia de Salud Digital
Como parte de la iniciativa el Grupo popular denuncia protagonismo y mención específica a la profesión farmacéutica dentro de la Estrategia de Salud Digital del SNS. A este respecto, la iniciativa demanda la integración la red de farmacias comunitaria en ella, “poniendo en valor la atención presencial y el asesoramiento sobre el uso racional de los medicamentos como complementos básicos para evitar el aislamiento de colectivos con acceso restringido a las herramientas digitales o con dificultades en su manejo”.
Paralelamente a la implantación de la Estrategia de Salud Digital, se instan también a tomar medidas para garantizar el acceso de todos los ciudadanos a las herramientas digitales, luchar para reducir la brecha digital e impulsar la cobertura de las redes de acceso de banda ancha y de la tecnología 5G para que llegue a toda la población. En este aspecto concreto, desde la formación apuntan que se debe prestar una especial atención a las personas mayores, a personas en situaciones de vulnerabilidad económica y a personas con discapacidad.