No se han equivocado, sino que los modelos predictivos tienen en cuenta muchos factores que cambian cada día. Los principales centros de investigación se afanan en dar datos que sean útiles. El Institute for Health Metrics and Evaluation (IHME) de la Universidad de Washington rehace sus cálculos de mortalidad para varios países al alza. También establece que el fin del confinamiento debería llegar cuando se alcancen en un día menos de 0,3 muertes por millón de habitantes. Para España, las 14 muertes en un sólo día no llegarán antes del 30 de abril.
Un informe del Institute for Health Metrics and Evaluation (IHME) de la Universidad de Washington realizaba una predicción de fallecidos presentes y futuros en España de 19.200 personas el pasado 6 de abril. Lo calculaba para un periodo amplio de la “primera ola” de covid-19, hasta el mes de agosto. Para Francia situaba el número de fallecidos en 17.167, para Reino Unido 12.868 o los 21.645 de Italia a la cabeza. Todas estas previsiones se han quedado cortas.
Investigadores del Imperial College de Londres, en un análisis encabezado por el Patrick Walker estimaba el 26 de marzo pasado que la pandemia de covid-19 “costará 150.000 vidas en Europa”. El autor aclara que “los hallazgos sugieren que todos los países deben escoger entre medidas costosas e intensivas para impedir la transmisión o el riesgo de que los sistemas sanitarios se vean rápidamente desbordados.” Muchos países no escogieron la primera de las opciones a tiempo.
Sin embargo, esas medidas han aparecido de manera desigual en los distintos países, algunos de los cuales como Suecia y Holanda aún no han alcanzado el punto máximo de muertes diarias. En España se ha “doblado el pico de la curva” alcanzado con 950 fallecidos al día 2 de abril pasado.
Demasiadas muertes en España
El IHME es una institución dotada de 300 analistas que no se equivocan fácilmente. ¿Qué está afectando a sus proyecciones? Para responder a esta pregunta es preciso revisar varios aspectos que se tienen en cuenta en las predicciones para todos los países. Estos factores se afectan de manera desigual según el comienzo abrupto de contagiados de cada región. España está a la cabeza del inicio brusco de contagiados, en Madrid y Barcelona especialmente, junto al norte de Italia y la ciudad de Nueva York. Son los comienzos lo que ha desbordado el sistema, y es la capacidad de reacción ante el desastre lo que ha evitado un drama aún mayor.
Los parámetros a tener presente: camas hospitalarias y camas de UCI
Las controversias por las muertes reales y su contabilización es común a muchos países, incluido España. Además, las quejas por la falta de recursos que el Estado debía proporcionar en los primeros días ha sido denunciada en Madrid y otras zonas de España. Sin embargo, la “construcción” del Hospital provisional de Ifema en 8 días ha sido un elemento crucial para la zona “cero” de la pandemia, Madrid. Otras iniciativas en Barcelona, con hospitales de campaña en polideportivos, han resultado determinantes para hacer frente a covid-19.
El punto de partida es el número de camas hospitalarias, el número de camas de UCI y los respiradores. Cada uno de estos tres elementos tienen una mayor demanda dependiendo del inicio brusco de la pandemia. También resulta clave el día en el que el país o la región inicia el confinamiento. Lo que no recogen los modelos predictivos es el nivel de protección de los profesionales sanitarios ni la generalización del reparto de mascarillas protectoras antes del confinamiento. Ambos factores influyen en el impacto de covid-19.
Camas de hospital y camas de UCI
La fuente incesante de nuevos contagiados que ingresaron en los hospitales van alimentando las UCIs. Es el colapso de los cuidados intensivos, incluyendo la falta de respiradores, la que también influye en la mortalidad de forma relevante. Pero los inicios no se pueden achacar a los sistemas sanitarios, sino a la forma abrupta en la que se da comienzo la pandemia en cada región.
Y el desastre podría haber sido mayor si no se habilitan de manera rápida, en poco más de una semana en Madrid, un hospital de apoyo con UCIs (Hospital de Ifema), además de los hoteles medicalizados para casos leves. Lo que corresponde a otro análisis más profundo es la razón epidemiológica de la probable alta carga de infectados que sufren países como España o Italia. Y digo probable porque lo determinará el estudio epidemiológico con una muestra de 60.000 personas.
Madrid especialmente, junto a Barcelona, serán zonas de especial riesgo, por el hacinamiento de las grandes urbes por sus acontecimientos culturales y sociales. O dicho en otras palabras: no podíamos evitar las consecuencias de reaccionar tarde a las medidas de contención, pero hemos sido capaces de reaccionar en tiempo record. Un mérito sólo atribuible a los que toman decisiones y a los profesionales sanitarios.
El 30 de abril, probable día de desconfinamiento, según los cálculos
La OMS ha establecido los parámetros cualitativos para levantar el confinamiento, pero no es capaz de indicar un momento o un dato concreto que sea aplicable a todos los países. Por eso resultan cruciales los modelos. Responder cuándo se volverá a una vida normalizada es la pregunta que las autoridades sanitarias no pueden responder. Pero hay un momento para volver a las tareas habituales como ir al trabajo, al cine (quizás) o de compras. Cosas normales antes del confinamiento. Pero se evitarán aglomeraciones y se impedirán los actos multitudinarios de ocio o culturales. Ese día en el que, al menos, saldremos del confinamiento debería ser cuando el número de fallecidos en un día por covid-19 se sitúen por debajo de 0,3 muertes por millón de habitantes, según los expertos del IHME. Según este modelo, cuando España reporte menos de 14 muertes en un día, cumpliría el requisito para un inicio de desconfinamiento. Y eso podría ser el 30 de abril, según el IHME.