La pandemia y sus consecuencias en el Sistema Nacional de Salud y en España son el motivo más inmediato de una crisis que ya no es solo sanitaria. Es también una crisis social y económica que solo podrá afrontarse desde una agenda reformista importante.

Los principios de esa agenda ya existen. Son los incluidos en el dictamen sanitario de la Comisión para la Reconstrucción. Con mayor o menor acierto, todos ellos pretendían abordar el futuro del SNS a corto, medio y largo plazo. Pero lamentablemente ya vamos tarde. La segunda ola ha llegado y, a pesar de los meses que han transcurrido desde que el Pleno del Congreso aprobó el dictamen, a la Cámara Baja no ha llegado todavía ninguna propuesta del Gobierno para implementar esos acuerdos.

Entre esos puntos estaban la creación de una agencia de Salud Pública y Calidad Asistencial; el fortalecimiento del SNS, el reconocimiento de su capital humano; el refuerzo de la Atención Primaria; la transformación digital, en coordinación con la industria, y especialmente la española; mejor coordinación y cooperación entre las administraciones; más protagonismo para los pacientes, para los expertos, para los investigadores, para las sociedades científicas, para la industria, para el sector privado, para las oficinas de farmacia…

El Congreso, de nuevo ante la agenda reformista

Es cierto que, a nivel más micro, algunos de los acuerdos debían ser seriamente modificados para garantizar que el SNS sigue siendo excelente y referente a nivel internacional. Precisamente por eso es tan importante que los acuerdos de la Comisión salgan del cajón y lleguen en forma de propuestas legislativas.

Mientras ello no ocurre, los grupos han visto en el Real Decreto de Nueva Normalidad una buena oportunidad de enmendar los puntos más conflictivos y reiterar la conveniencia de ciertas medidas a las que se sigue haciendo oídos sordos, como la eliminación de los visados a los ACOD o la triple terapia en EPOC o el propio papel asistencial de la oficina de farmacia. El Congreso tiene, otra vez, un papel clave en la agenda reformista del SNS.

También te puede interesar…