Dice el refranero español que cuando el río suena, agua lleva. Así que cuando suena que la nueva Ley de Garantías y Uso Racional del Medicamento podría incorporar una reforma del Sistema de Precios de Referencia, es porque algo de cierto llevará.

Fuentes del Ministerio de Sanidad han confirmado a este medio que se estudia permitir que genéricos y biosimilares puedan bajar su precio respecto a los equivalentes de marca. Sin embargo, tan solo es un posibilidad, aunque “muy factible”. Al parecer, lo que se pretende es impulsar este tipo de fármacos, para que ganen cuota de mercado y competitividad.

Hubo un tiempo en el que, cuando salía un nuevo precio de referencia, tenía ventaja el genérico. Ahora no. Y, además de esa pérdida de competitividad, el problema actual es la dificultad de acceso al mercado de los nuevos medicamentos. Pero lo que no puede ser de ningún modo es que las compañías bajen tanto los precios de sus medicamentos, llegando a tales niveles que hagan que el resto de los productos queden fuera del mercado y que les obliguen a los otros a bajar sus precios de manera temeraria. Y es que llegará un momento en que los laboratorios no tendrán la capacidad de moverse en esos precios.

Por ello, se trata de una medida muy ‘verde’ y aún está por ver cómo se desarrolla (o si finalmente se lleva a cabo de algún modo). Lo que sí es seguro es que Sanidad se está planteando modificar el sistema actual. Tendremos que esperar a que ellos mismos aclaren exactamente a dónde pretenden llegar.