Los Consejos sanitarios y las Sociedades Científicas preparan sus planes y actividades para abordar el impacto del cambio climático en la salud, y llamar a la concienciación y la acción.

El compromiso y la cooperación de los países y de los organismos internacionales sobre el cambio climático es una realidad, con sus retos y dificultades. Pero nos olvidamos que es un problema de salud pública que implica planificar su impacto, prevenir y conocer la manera en la que el cambio climático influirá en nuestra salud. Lo que ya sabemos es que un niño que nazca hoy estará afectado por el cambio climático toda su vida, afirma THE LANCET.

El cambio climático influye ya en nuestra salud

Pero también afecta ya a todas las personas a nivel global, de países en vías de desarrollo y de modernas ciudades en Europa. No conseguir acuerdos en el control de emisiones de carbono provocará un incremento de 4 grados en la temperatura media global y ocasionará daños dramáticos en la salud a un niño nacido hoy cuando tenga 71 años de edad, dicen los informes publicados. Si el cambio climático definirá la salud de toda una generación, ahora está condicionando ya la salud de nuestra sociedad, y especialmente de los enfermos crónicos. Analizar de qué manera afecta a la salud exige abordar ya el impacto en cada patología respiratoria, cardiovascular, neurológica o, incluso, en la carcinogénesis de algunos procesos oncológicos.

El cambio climático y el calentamiento global ya afecta a la salud de personas sanas, enfermos crónicos, niños y mayores.

Iniciativa de los Consejos Sanitarios

La iniciativa promovida por la Organización Médica Colegial (OMC) de aglutinar a todos los consejos profesionales (medicina, farmacia, enfermería, nutrición, veterinaria, odontología y hasta 15 entidades) es relevante, oportuna y necesaria. La OMC les convoca a un encuentro el próximo 25 de Febrero donde realizarán un llamamiento político y social a unir esfuerzos en relación al cambio climático. La iniciativa persigue una concienciación política y llama a la acción, en línea con la emergencia climática declarada el pasado Enero en el Consejo de Ministros. El sistema sanitario debe ser parte de la respuesta, con su profesionales y sociedades científicas.

Las olas de calor ya exponen a 220 millones de personas en todo el mundo, y va aumentando

Nadie bien informado pone en duda las muertes a causa del cambio climático: en 2018, 220 millones de personas mayores se expusieron a olas de calor que pueden ser mortales, 11 millones más que en 2015. Estrés cardiovascular, fallo renal o infarto son frecuentes en las olas de calor. El problema crece, lejos de disminuir.

El impacto del cambio climático en la salud es ya relevante, pero en los niños nacidos hoy será dramático

Hasta ahora el cambio climático se ha vivido como algo de organismos internacionales, pero afecta a la vida de todas las personas, y a su salud.

La revista THE LANCET monitoriza con su iniciativa Lancet Countdown la evolución del cambio climático y la salud, y realiza un seguimiento de los compromisos de los Gobiernos tras el Acuerdo de París sobre el cambio climático. El informe de 2019 actualiza 41 indicadores de cinco areas: impacto del cambio climático, exposición y vulnerabilidad; adaptación, planificación y resiliencia sanitaria; acciones mitigadoras y co-beneficios sanitarios; economía y finanzas; y el compromiso político y público. El interés en la resiliencia sanitaria de la OMS se traduce en distintos informes. Se trata de analizar las habilidades y procesos para afrontar como individuo, comunidad y sistema sociosanitario, los efectos del cambio climático. Y no son pocos, desde la la contaminación ambiental, las sequías o las catástrofes naturales. El cambio climático ya está afectando la salud de todos, pero especialmente de las personas con enfermedades pulmonares, cardiovasculares, neurológicas o en los alérgicos. En muchos casos, ya emerge una nueva toxicología del medio ambiente como una disciplina para los farmacéuticos de hospital.

Los más afectados son personas con enfermedades pulmonares, cardiovasculares, neurológicas y alérgicos.

El papel de las Sociedades Científicas

En breve, algunas de las Sociedades Científicas más afectadas y concienciadas con el incremento de la morbimortalidad por el cambio climático concretarán planes y posturas. Oncología (SEOM), alergología (SEAIAC), cardiología (SEC), neumología (SEPAR) y farmacia de hospital (SEFH). Y más les seguirán. Son los especialistas que están en contacto con pacientes reales que ya sufren efectos que hay que conocer y abordar. Si la salud es lo más importante para las personas, el cambio climático lo es para los profesionales sanitarios que los tratan.