Aunque el parón estival parecía la excusa perfecta para apaciguar el clima de tensión entre algunos grupos políticos de la Comisión de Sanidad del Congreso de los Diputados, no solo no ha sido suficiente sino que lo ha avivado.
El orden del día de la primera sesión tampoco ayudaba a rebajar el tono: acceso a innovación, a través del Alto Panel de Alto Nivel sobre acceso a los Medicamentos de Naciones Unidas, y pseudociencias.
Tanto Ciudadanos como el Partido Popular defendieron Proposiciones No de Ley (PNL) sobre las pseudoterapias. La Cámara Baja tumbó la iniciativa de la formación naranja con 30 votos en contra y cinco a favor.
El aspecto que más controversia generaba entre los diputados era el hecho que defendió Francisco Igea, portavoz de C’s, de que los médicos persigan las pseudociencias. “Los profesionales son elementos esenciales a la hora de detectar agresiones o abusos”, explicó Igea, al tiempo que aseguró que no se trata de poner nuevas responsabilidades a los profesionales, sino de ayudarles a cumplir las que ya tienen.
El objetivo que persigue Ciudadanos es crear un protocolo específico para denunciar los daños de las pseudoterapias. Sin embargo, a juicio del portavoz del PSOE en la Comisión, Igea “confunde los enemigos y confunde los instrumentos”. Tirando de literatura y parafraseando a Cervantes en el Quijote “confunde molinos con gigantes y confunde las armas, buscando hacer de los médicos, policías o inspectores, y de los fiscales, médicos o evaluadores de tecnologías sanitarias”. Fernández ha insistido en que un médico no puede denunciar a otro que ante un insomnio de un paciente prescriba un ansiolítico.
Del mismo modo, el Partido Popular consiguió la aprobación de la Cámara y el apoyo del PSOE para sacar adelante su propuesta. La transaccional acordada insta al Gobierno a “promover, en colaboración con las comunidades autónomas, un mayor control y vigilancia sobre centros y personas que no estén oficialmente acreditados y publiciten falsas actividades curativas”. Del mismo modo, se inspeccionarán “los centros y servicios que practican terapias no convencionales”.
En este sentido, como han recordado tanto el PP como el PSOE el objetivo es mejorar el control y la vigilancia frente al intrusismo.
En cualquier caso, no ha convencido a la formación que lidera Albert Rivera, ya que Ciudadanos ha votado en contra de esta propuesta, poniendo aún más de manifiesto la imparable brecha que existe con el resto de grupos.
Acceso a medicamentos
Por otra parte, la Comisión ha aprobado por mayoría la Proposición No de Ley (PNL) de Podemos que insta al Gobierno a hacer efectivas, en su ámbito de competencias las recomendaciones contenidas tanto en el Informe de Alto Nivel de Acceso a Medicamentos de Naciones Unidas como las propuestas incluidas en el Informe Cabezón.
La iniciativa contó con los votos favorables del PSOE y Ciudadanos y el voto en contra del Partido Popular.
Desde Podemos se defiende un cambio radical en el modelo de acceso a medicamentos.
Por su parte, desde el Partido Socialista se puso sobre la mesa las recomendaciones del Informe Cabezón para impulsar ese cambio de modelo.
Frente a ellos, el PP sacó pecho del Real Decreto 16/2012, ya que, en opinión de Teresa Angulo, portavoz del PP, los problemas a los que aluden ambos informes hacen referencia a países que tienen problemas y que “España no posee”. A su juicio, las compras centralizadas; modelos de financiación ad hoc; y medidas para la promoción del uso de medicamentos genéricos están en marcha en España funcionando para asegurar el acceso de los pacientes con equidad a los tratamientos. De este modo, Angulo remarcó el esfuerzo del Gobierno por la sostenibilidad y la universalidad.