El Ministerio para la Transición Ecológica (Miteco) ha publicado el borrador del Plan Nacional de Adaptación al Cambio Climático (PNACC). El documento cubre el horizonte temporal 2021-2030 y pretende establecer una hoja de ruta que de respuesta a las necesidades de adaptación al cambio climático en España. El objetivo es claro: establecer una economía y sociedad «más seguras y menos vulnerables ante los riesgos climáticos, anticipándose a lo proyectado por la Ciencia».

En este sentido, el ministerio pretende evitar o reducir los riesgos económicos, sociales y ecológicos, así como favorecer la recuperación tras los impactos. El Plan incluye 81 líneas de acción a desarrollar por parte de los diferentes sectores socioeconómicos del país, según un comunicado del Miteco.

“Clima, naturaleza y biodiversidad están estrechamente conectados, pero sabemos también que el modo en el que vivimos, depende enormemente del estado de salud del clima”. Así lo ha señalado la vicepresidenta cuarta y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera. En este sentido, el PNACC actúa como un instrumento de planificación básico para promover una acción coordinada y coherente entre las Administraciones Públicas.

«El modo en el que vivimos depende del estado de salud del clima»

Teresa Ribera, ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico

El documento enmarca distintos sectores considerados clave como la agricultura, la silvicultura, el turismo o el transporte, todos ellos dependientes del clima. Asimismo, la salud humana, la biodiversidad y la vivienda constituyen campos esenciales para el bienestar. Según el ministerio, las políticas de adaptación aportarán mayor estabilidad económica y social y nuevas oportunidades, ya que las inversiones planificadas “pueden crear nuevas actividades económicas y posibilidades de empleo, reduciendo la incertidumbre asociada al clima”. Estas medidas generarían “efectos positivos” como la conservación de la biodiversidad, la protección de la salud o la propia mitigación del cambio climático.

Los eventos extremos afectan de manera muy desigual a las regiones, por lo que el Miteco fomentará análisis geográficos en los estudios de riesgos. Además se desarrollarán respuestas adaptativas según los niveles de vulnerabilidad territorial y social. El documento considera los “efectos transfronterizos”, ya que los efectos del cambio climático fuera de España pueden afectar indirectamente al país.
Además, el Plan tendrá en cuenta su huella ecológica y la incorporación de criterios para prevenir la llamada “mala adaptación” en las ayudas públicas. El enfoque de género, los costes y beneficios de adaptación e inacción o la orientación de los análisis de riesgos son otras de las líneas transversales del plan.