“En nombre de todas las personas que formamos parte de Gilead es un orgullo poder estar aquí recogiendo este premio que reconoce un aspecto clave de lo que es la labor de la compañia”. Son palabras de María Río, vicepresidenta y directora general de Gilead España, que recogió este martes el Premio Fundamed en la categoría de I+D+i.
Río hizo hincapié en que “Gilead ha hecho de la investigación su seña de identidad”. “Hemos contribuido a la transformación de enfermedades como el VIH o la hepatitis C y ahora estamos esperanzados con el papel de las terapias celulares”, subrayó.
Además, la directora general destacó que han tenido “la oportunidad de luchar contra la COVID-19 desarrollando el antiviral que ha sido el primer tratamiento aprobado”. En la misma línea, Río recordó que España es el segundo país, después de EE. UU. donde hay mas recursos implicados en investigación, al igual que ha pasado con remdesivir.
La portavoz de la compañía repasó iniciativas para promover la investigacion con programas de becas, como el que llevan a cabo en colaboración con el Instituto de Salud Carlos III, de las que se muestran muy satisfechos. “Que se nos reconozca como innovadores nos hace sentir especialmente orgullosos”, concluyó.
Un gran recorrido
Un compromiso inquebrantable con la I+D+i y determinación para hacer posible lo imposible son los pilares sobre los que Gilead ha construido su estrategia para transformar las áreas donde está presente: terapias avanzadas CAR-T, VIH, hepatitis C y SARS-CoV-2, desarrollando tratamientos con los que mejorar la calidad de vida de los pacientes dado su compromiso con la salud de los ciudadanos.
En tiempos de pandemia, su fármaco remdesivir ha sido el primer antiviral de amplio espectro autorizado en más de 50 regiones y países de todo el mundo, entre ellos en la Unión Europea y Estados Unidos, para el tratamiento de la COVID-19 en pacientes con neumonía que requieren oxígeno suplementario.
“Que se nos reconozca como innovadores nos hace sentir muy orgullosos”, destacó María Río
A pesar de las dificultades, Gilead ha seguido fomentando el desarrollo de su pipeline en áreas con necesidades no cubiertas, fortaleciendo su posición en enfermedades hepáticas y oncología.
En este terreno todas las miradas apuntan al desarrollo de sacituzumab govitecan-hziy, un fármaco de anticuerpos conjugados, que los especialistas denominan ‘caballos de Troya’, con grandes expectativas en cáncer de mama y cáncer urotelial.
En terapia celular, Gilead ha experimentado importantes avances en 2020. Con Yescarta® y Tecartus® en mercado, será la primera compañía biofarmacéutica con dos CAR-T comerciales aprobadas en la UE.