Durante la III Green Week Selfcare, organizada por la Asociación para el Autocuidado de la Salud (anefp), distintos expertos abordaron asuntos relevantes en torno a la sostenibilidad ambiental y cómo el sector de medicamentos y productos de autocuidado avanza en su compromiso con el cuidado del medioambiente, encontrando el equilibrio entre la salud de las personas y la salud del planeta.
La Asociación de Fabricantes y Distribuidores (AECOC), en declaraciones a El GlobalFarma, explica que una de las conclusiones más importantes de la cita fue que “la industria farmacéutica debe desempeñar un papel clave en la descarbonización global, debido a su impacto significativo en el medio ambiente a nivel mundial”. Además, consideran fundamental actuar de inmediato para anticiparse a los cambios, “ya que las regulaciones ambientales se están volviendo cada vez más estrictas”.
La industria farmacéutica está adoptando diversas estrategias para reducir su huella de carbono, tales como el uso de energías renovables, la optimización de procesos productivos, la electrificación de flotas y la mejora de la eficiencia energética en sus instalaciones. Además de ello, están implementando medidas de ecodiseño en los envases y políticas orientadas a reducir las emisiones en la cadena de suministro.
Muchas compañías han establecido objetivos ambiciosos de descarbonización, con metas de reducción a corto plazo y compromisos para lograr la neutralidad climática en las próximas décadas, en línea con los objetivos europeos de Cero Emisiones Netas (Net Zero). Almirall y Viatris son ejemplos de ello. La primera compañía está enfocada en cumplir esta estrategia y, según confirma a EG César Hernández Martín, Global Sustainability Executive Director de Almirall, esta cuenta con una hoja de ruta clara para la descarbonización, integrada dentro de su estrategia de sostenibilidad Act4Impact 2030, concretamente en el pilar Planeta. “Nuestro objetivo es alcanzar cero emisiones netas en 2050, con metas intermedias validadas por la Science-Based Targets Initiative (SBTi) para garantizar que nuestras acciones estén alineadas con la ciencia climática”, subraya Hernández.
A continuación, Hernández asegura que el compromiso de la farmacéutica para 2030 es reducir en un 50% las emisiones directas y las derivadas de la adquisición de energía (alcances 1 y 2), así como disminuir en un 28% las emisiones de toda la cadena de valor de la compañía, en comparación con el año 2019. Desde 2011 hasta 2024, Almirall ha invertido en múltiples proyectos de eficiencia energética que han logrado una reducción del consumo energético del 27%. Desde 2018, el 100% de la electricidad en todos sus centros proviene de fuentes renovables, del mismo modo que están implementando un ambicioso plan de inversiones para reducir el consumo de gas natural en al menos un 50% en 2030 respecto al año base 2019. Por último, han incorporado vehículos híbridos y eléctricos, con el objetivo de reducir las emisiones en un 24% en el periodo 2024-2027 y en un 50% para 2030. Además, la farmacéutica ha instalado placas fotovoltaicas en sus principales centros, alcanzando un 11% del consumo total de electricidad en 2024, con el objetivo aumentar esta cifra al 18% para 2030.
Por su parte, Viatris también ha implementado la estrategia Net Zero y, en palabras de Raúl Moya, Head of Supply Chain Spain de Viatris, “la obtención de la certificación Lean & Green y de la primera estrella ha supuesto un reconocimiento al compromiso de Viatris en España con la sostenibilidad”. Para Moya, este hito les ha permitido medir y reducir su huella de carbono en la distribución local de medicamentos, mejorar la eficiencia logística y reforzar su posición como laboratorio de referencia en distribución sostenible en España. Además, confirma que “contribuye a respaldar nuestra misión de fomentar que las personas en todo el mundo vivan de forma más saludable en cada etapa de la vida y fomentar prácticas cada vez más sostenibles”.
Respecto a la cuestión de si existen incentivos para las compañías que reduzcan su huella de carbono, AECOC confirma que sí que los hay. “Existen varios incentivos económicos, como la reducción de costos energéticos al adoptar fuentes renovables y procesos más eficientes”, argumentan. Además, precisan que “las compañías que implementan estrategias climáticas sólidas no solo mejoran su reputación, sino que también fortalecen las relaciones con inversores y tienen acceso a financiamiento verde en condiciones más favorables”.
En la actualidad, AECOC menciona que los proveedores y la cadena de suministro son responsables de la mayor parte de la huella de carbono de la industria farmacéutica, especialmente debido a la producción de materias primas, la fabricación de envases y la logística global. “El transporte refrigerado, el uso de plásticos y la energía utilizada en la producción de componentes químicos contribuyen significativamente a las emisiones”, afirman. Por esta razón, sostienen que muchas compañías farmacéuticas están fomentando prácticas más sostenibles.
A pesar del gran esfuerzo de las compañías en esta materia, aún persisten retos. Según Hernández, uno de los principales tiene que ver con reducir las emisiones indirectas de la cadena de valor (alcance 3) y en especial las asociadas a la cadena de suministro, que representan actualmente el 85% de la huella de carbono de Almirall. “Esto pone de manifiesto la necesidad de colaborar estrechamente con proveedores y socios estratégicos para avanzar hacia los objetivos climáticos globales, pero es un proceso complejo”, expresa Hernández.
Para AECOC, el principal desafío del sector a corto plazo es implementar energías renovables, mejorar la eficiencia energética y optimizar la logística. A medio plazo, ven necesario avanzar hacia procesos de fabricación más sostenibles, reducir el impacto de los envases y colaborar con los proveedores para disminuir las emisiones. Por último, a largo plazo consideran que el objetivo debe ser alcanzar la neutralidad climática, innovar en productos más sostenibles y adaptarse tanto a regulaciones más estrictas como a las nuevas demandas del mercado.
“Desde anefp reafirmamos nuestro compromiso con la sostenibilidad con la organización de eventos como la III Green Week Selfcare, en la que se han dedicado sesiones a un tema tan relevante para las empresas de nuestro sector como la medición y reducción de la huella de carbono”, explican. Por ello, consideran que “es esencial fortalecer las alianzas con otras entidades y seguir ofreciendo formaciones especializadas, garantizando que empresas de todos los tamaños puedan acceder al conocimiento y los recursos necesarios para avanzar en esta materia”.