El Departamento de Salud y Servicios Humanos (HHS, por sus siglas en inglés) de Estados Unidos firma un acuerdo con Moderna para desarrollar una vacuna de ARNm dirigida a la gripe aviar pandémica, en caso de que la inyección sea necesaria con el último brote. La compañía americana obtuvo casi 186 millones del gobierno de Estados Unidos para acelerar su desarrollo, tal y como declaró Dawn O’Connell, subsecretaria de Preparación y Respuesta. “La vacuna se adaptará para que pueda atacar a varias cepas de gripe con potencial pandémico, incluida la familia de virus de la gripe aviar actualmente en circulación”, expresó.
Según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés), ya se ha detectado el virus H5N1 en 136 rebaños de ganado de 12 estados y ha infectado a tres trabajadores agrícolas este año, tal y como informa Bloomberg. A pesar de ello, lo máximos responsables sanitarios del país mantienen que el riesgo del H5N1 para la sociedad sigue siendo bajo. Según O’Connell, no se ha detectado ninguna transmisión entre humanos. “Nuestro trabajo es estar preparados en caso de que esto cambie”, afirmó. “Si hubieras preguntado a cualquier experto en 2018 cuál esperaba que fuera la próxima pandemia, habrían dicho que una gripe altamente virulenta”, añadió.
El gobierno tiene en producción 4,8 millones de dosis de una vacuna H5 con una plataforma tradicional, dijo O’Connell. La vacuna está adaptada a las cepas actualmente circulantes del virus H5N1 de la gripe aviar y debería salir de la línea de producción a partir de mediados de este mes, antes de lo previsto, dijo. “El riesgo para la población en general sigue siendo bajo en estos momentos y la evaluación de los CDC al respecto no ha cambiado“, afirmó Demetre Daskalakis, director del Centro Nacional de Inmunización y Enfermedades Respiratorias de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC). Aunque la adjudicación gubernamental se centra en las cepas peligrosas de la gripe, podría cambiar en caso de que surgiera una amenaza pandémica distinta.
La ventaja de la tecnología de ARNm, que fue la base de las vacunas para la COVID-19 de Moderna y Pfizer es su rápida capacidad de adaptación a las nuevas mutaciones del virus, lo que supone una ventaja potencial sobre las vacunas tradicionales. Los resultados de los primeros estudios de Moderna sobre la vacuna contra la gripe aviar se esperan para las próximas semanas. Según O’Connell, Estados Unidos quiere ayudar a Moderna a generar los datos necesarios para obtener la autorización de los organismos reguladores americanos. Pero el contrato, firmado a través de la Biomedical Advanced Research and Development Authority, va mucho más allá. Incluye opciones para que Estados Unidos adquiera suministros de vacunas, que se producirían en el país y requerirían financiación adicional.
Las vacunas tradicionales contra la gripe pandémica están más avanzadas en cuanto a desarrollo y producción. Estados Unidos tiene dos vacunas candidatas adaptadas a la cepa H5N1 actual y las está probando con GSK, Sanofi y CSL Seqirus. Ya hay cientos de miles de jeringuillas precargadas, y Estados Unidos ha encargado a CSL el llenado y acabado de otros 4,8 millones de dosis de vacunas.
Medidas de bioseguridad
Más de 780 personas han sido controladas como resultado de su exposición a vacas infectadas, y al menos 53 han sido sometidas a pruebas, según afirman los CDC. Las medidas de bioseguridad que ya se aplican en muchas granjas han sido esenciales para evitar la propagación del virus, afirmó Eric Deeble, asesor principal en funciones para la respuesta al H5N1 en el Departamento de Agricultura de Estados Unidos, pero el país debe estar preparado para cualquier cosa. “Sabemos que la gran mayoría de las granjas practican la bioseguridad, incluidas las granjas lecheras”, declaró Deeble en la conferencia de prensa del martes. “Pero esta es una enfermedad nueva y emergente que exige un conjunto diferente de prácticas de bioseguridad o mejoras de algunas específicas”, concluyó.
La gripe aviar es una enfermedad viral altamente contagiosa causada por el virus de la familia Orthomyxoviridae, del género Influenzavirus A y B. Existen varias cepas del virus de influenza aviar, las cuales pueden clasificarse, de forma general, en dos categorías según la gravedad de la enfermedad en las aves de corral: