La Reunión ESMO Breast Cancer 2023 (Berlín, Alemania) ha sido escenario de presentación de nuevos datos que respaldan la seguridad y eficacia de los anticuerpos inmunoconjugados (ADCs- antibody-drug conjugates) en cáncer de mama.
La llegada de los ADCs para atacar los antígenos sobreexpresados ha abierto la puerta a una nueva clase terapéutica contra esta enfermedad. De hecho, las lecciones aprendidas en la investigación y administración de ADCs de segunda generación pueden dirigir el tratamiento en otros tipos de tumores.
El primero de su clase, Kadcyla (trastuzumab emtansine), ha formado parte durante mucho tiempo del estándar tratamiento en cáncer de mama HER2+ y ha demostrado ser clave tanto en enfermedad metastásica como en estadio precoz. Sin embargo, la llegada de la segunda generación de ADCs trajo consigo mayor precisión. En agosto de 2022, la Comisión Europea (CE) aprobó Enhertu (trastuzumab deruxtecán) para el tratamiento de pacientes adultos con cáncer de mama HER2 positivo no resecable y/o metastásico que han recibido uno o más regímenes previos anti-HER2, ampliando así su indicación en la UE para un uso más temprano en cáncer de mama metastásico HER2+.
«Enhertu ha transformado la forma en que tratamos el cáncer de mama metastásico HER2 positivo y ha reemplazado a Kadcyla como tratamiento estándar de segunda línea», señalan desde ESMO. Por su parte, Trodelvy (sacituzumab govitecan) —un ADC dirigido a Trop-2 y primero de su clase— no solo estableció un nuevo estándar para el tratamiento del cáncer de mama triple negativo metastásico, sino que demostró una reducción a la mitad del riesgo de muerte.
Sin embargo, tal y como se ha señalado en esta reunión, los ADCs de segunda generación también son activos en tumores con una expresión diana intermedia o baja, como se muestra para Enhertu en DESTINY-Breast04 y en el estudio TROPiCS-02. La demostración de que los ADCs de segunda generación presentan actividad en el amplio espectro de subtipos de cáncer de mama proporciona «la justificación» de probar estos compuestos en diferentes tumores sólidos, según indican desde ESMO.
Actualmente, hay tres ADC aprobados para cáncer de mama que cubren todos los subtipos: Kadcyla (trastuzumab emtansine), Enhertu (trastuzumab deruxtecan) y Trodelvy (sacituzumab govitecan).
ADC en HER3
La sobreexpresión de HER3 juega un papel oncogénico clave en cáncer de mama, asociándose con mal pronóstico y resistencia a los inhibidores de PI3K/AKT/mTOR y terapia endocrina. Hasta ahora, los esfuerzos terapéuticos no habían conseguido resultados satisfactorios. Sin embargo, patritumab-deruxtecan (HER3-DXd) muestra cierta ‘promesa’ para atacar HER3, como así lo sugieren varias presentaciones llevadas a cabo en ESMO Breast Cancer 2023.
Los resultados del ensayo de fase II ICARUS-BREAST01 de un solo brazo en 56 pacientes con cáncer de mama avanzado HR+, HER2- —no seleccionadas para la expresión de HER3— que han progresado a varias líneas de tratamiento ha arrojado los siguientes datos a los tres meses: respuesta parcial en 16 pacientes (28,6 por ciento), enfermedad estable en 30 pacientes y enfermedad progresiva en 10.
“Aunque solo participó un número relativamente pequeño de pacientes, la tasa de respuesta a los tres meses del 28,6 por ciento, junto con una tasa de enfermedad estable del 54 por ciento, es suficiente para justificar el cambio a ensayos aleatorios”, señala Javier Cortés director Centro Internacional de Cáncer de Mama (IBCC), Barcelona, España.
Seguridad extendida
En esta misma línea, nuevos datos sobre información de seguridad extendida han respaldado resultados clave en ensayos de cáncer de mama metastásico con Enhertu y Eelacestrant.
Los análisis de los ensayos DESTINY-Breast04, DESTINY-Breast02 y EMERALD han tenido como objetivo refinar los conocimientos actuales para guiar el tratamiento de pacientes con cáncer de mama metastásico al proporcionar información de seguridad detallada y resultados informados por los pacientes (PRO) de los últimos estudios.
Las dos presentación para el ADC no han resaltado preocupaciones de seguridad adicionales ni desde el punto de vista del médico ni desde la experiencia del paciente. En concreto, el análisis del ensayo DESTINY-Breast04 ha mostrado que tras 8,2 meses de tratamiento los eventos adversos emergentes de cualquier grado fueron menores comparados con la terapia estándar. El segundo análisis compartió datos de PRO del estudio de fase III DESTINY-Breast02. El estado de salud global se mantuvo estable hasta el ciclo 39.