La Comisión Europea ha anunciado la firma de un contrato marco de adquisición conjunta con la empresa farmacéutica Glaxo Smith Kline para el suministro de sotrovimab (VIR-7831), una terapia de anticuerpos monoclonales en investigación, desarrollada en colaboración con la biotecnología VIR. Sotrovimab se puede usar para el tratamiento de pacientes adultos y pediátricos (mayores de 12 años y que pesen al menos 40 kg) con coronavirus con síntomas leves que no requieren oxígeno suplementario, pero que tienen un alto riesgo de COVID-19 grave.

Dieciséis Estados miembros de la UE están participando en la contratación para la compra de hasta 220.000 tratamientos de sotrovimab, la cual forma parte de la primera cartera de cinco terapias prometedoras anunciadas por la Comisión en junio de 2021, y actualmente está siendo revisado por la Agencia Europea de Medicamentos. Los estudios en curso sugieren que el tratamiento temprano puede reducir el número de pacientes que progresan a formas más graves y requieren hospitalización o ingreso en las unidades de cuidados intensivos. 

En virtud del contrato marco actual con Glaxo Smith Kline, los Estados miembros pueden comprar sotrovimab (VIR-7831) cuando sea necesario, una vez que hayan recibido una autorización de uso de emergencia en el Estado miembro en cuestión o una autorización de comercialización (condicional) a nivel de la UE del Agencia Europea de Medicamentos.

“Nos comprometimos en nuestra estrategia terapéutica COVID-19 tener al menos tres nuevas terapias autorizadas para octubre. Ahora estamos posibilitando un segundo contrato marco que brinda tratamientos con anticuerpos monoclonales a los pacientes. Junto con las vacunas, las terapias seguras y eficaces desempeñarán un papel fundamental en el regreso de Europa a una nueva normalidad”, Stella Kyriakides, comisionada de Salud y Seguridad Alimentaria.

Por su parte, George Katzourakis, Senior Vice President para Europa de GSK, considera que “este acuerdo con la Comisión Europea representa un paso adelante crucial para el tratamiento de casos de COVID-19 en los estados miembros de la UE, ya que permite el acceso a sotrovimab para pacientes de alto riesgo que han contraído el virus”, expone. “A medida que el panorama de la COVID-19 continúa evolucionando y nos enfrentamos a nuevos desafíos, como la variante Delta que se está extendiendo por todo el mundo, sigue existiendo una necesidad urgente de contar con opciones de tratamiento para ayudar a evitar potencialmente la hospitalización o la muerte”, añade.