La Red ‘La salud del paciente por delante’, conformada por un grupo multidisciplinar de profesionales sanitarios y organizaciones de pacientes, ha redactado un documento titulado ‘Por un tratamiento razonado y comprometido con el paciente anticoagulado’, en el que se pide un acceso rápido y equitativo a las nuevas terapias disponibles.
Así, pese a que estos tratamientos representan, a juicio de los firmantes, “un nuevo paradigma y una oportunidad de mejora como alternativa a los clásicos, tanto en la reducción de eventos isquémicos, como de sangrado grave y mejora de la calidad de la vida”, lo cierto es que hay subgrupos de población que podrían beneficiarse y para los que no están indicados, además de problemas de acceso para el resto en algunas comunidades autónomas.
Y es esto lo que les lleva a afirmar que “el ritmo de introducción de los NACO en España es inferior al de países como Francia, Alemania, Suiza o Bélgica”, lo que podría traducirse en una “pérdida de beneficios clínicos”, y, pese a su coste superior, “de ahorros derivados de la monitorización y los eventos evitados”.
Por este motivo, los participantes han realizado una serie de propuestas que pasan por un reconocimiento de los NACO como una innovación terapéutica de gran valor para los pacientes y el propio sistema sanitario; por el desarrollo de un consenso para definir un método homogéneo y válido de control de la anticoagulación para todas las comunidades autónomas; por una mejor formación de los profesionales sanitarios en la mejora de la calidad de los tratamientos, de modo que puedan prescribir la terapia anticoagulante más apropiada bajo el conocimiento científico; y por la optimización de la innovación y el valor que aportan estos medicamentos que implica una incorporación sin demoras a la práctica asistencial.