Mariano Avilés, abogado del despacho Farmaiuris
Los dos RDL en materia de gasto son demoledores. Así lo dice un estudio de Farmaiuris, Guía legal sobre las medidas extraordinarias en materia de gasto farmacéutico, que incide en la naturaleza de las posibilidades de la Administración frente al resto de los agentes y patronal, quienes son comparsas cuando el Estado quiere. Utilizar el RDL para legislar es indeseable, no es atacable en vía contenciosa y obliga a ir al Tribunal Constitucional.
La Directiva 1985/105/CEE reguló la limitación de los precios y su posibilidad de congelación. El RDL 4/2010 tendrá un impacto económico sobre la facturación del SNS a corto plazo, además de modificar la Ley de Garantías, al zanjar unilateralmente la limitación de las descuentos a las boticas, simplificar el procedimiento de financiación de precios o los ajustes en el SPR. O la nueva redacción del RD 618/2007 respecto de la dispensación a pacientes ambulatorios en los Servicios de FH para permitir negociar compras masivas con precios más baratos por concurso público.
Por otro lado, al eliminar el plazo de vigencia mínimo de los precios se echa por tierra la seguridad jurídica y garantía en los precios y el sector queda frente a una Administración que puede actuar con total discrecionalidad, contradiciendo los compromisos de previsibilidad, objetividad y estabilidad que deben regir la intervención de precios. Asimismo, el RD 5/2000 es un sistema perverso que reduce las partes implicadas a una: el Estado. Ahora, con el RDL 4/2010, se pueden modificar márgenes y deducciones. Es una lógica deslegalización a favor del Ejecutivo para evitar el efecto de congelación de rango que tiene el modificar un reglamento por norma con rango de ley.
Sin que la luna cambiara su fase el Gobierno aprobó un nuevo recorte a través del RDL 8/2010, que afecta a los fármacos fuera del SPR mediante descuentos generales a los no genéricos. En este RDL 8/2010 se aplican descuentos en el RDL 4/2010 se rebaja el precio. Un recorte general en la facturación de los agentes que es sencillo y de fácil aplicación. Igualmente, querer introducir vía RDL la dispensación individualizada tiene un tinte programático que afecta a principios irrenunciables en el modelo de farmacia: la garantía y la información. Si la independencia económica deja de existir o se reduce a una expresión pírrica y la seguridad e información se ve alterada, estaremos ante un nuevo modelo de farmacia, que sería el resultado de que los Estados miembro no son tan soberanos.
El sector se ha visto seriamente afectado y aún no se ha repuesto del susto y como indica el estudio “es indudable que estas modificaciones extraordinariamente frecuentes de los criterios de intervención en los precios afectan de modo esencial a la seguridad jurídica y a la garantía de estabilidad económica que exige el sector”. Posiblemente estemos ante un modelo al que se le ha puesto fecha de caducidad.