José Martínez Olmos
Secretario general de Sanidad
j.m.l
Madrid
Pregunta. ¿Son suficientes las medidas acordadas a corto y medio plazo?
Respuesta. El real decreto ley no incluye todas las medidas. Tiene aquellas que están en el documento aprobado en el Consejo Interterritorial para permitir una suficiencia financiera a corto plazo, de carácter inmediato para conseguir un ahorro en un aspecto concreto. Hay otras medidas, que están puestas en el documento que se van a ir adoptando.
P. Si se excluye el SPR, el impacto inmediato vendrá dado por la rebaja de los genéricos, estimada en más de 300 millones. Sin embargo, podríamos decir que estas medidas sólo ahorrarán 180 millones este año.
R. Nosotros no tomamos decisiones para 2010, sino decisiones que ya son, en ese sentido, estructurales. Nunca hemos dicho que en 2010 ahorraremos 1.500 millones. Hemos dicho que, cuando se tomen estas medidas, queremos que en 12 meses se produzca un ahorro de 1.500 millones. Si me pregunta si esas medidas solucionan el problema, contesto que el documento dice que son medidas de carácter inmediato junto a otras que están en la hoja de ruta.
P. ¿Se puede descartar a corto plazo hacer nuevas actuaciones sobre el medicamento?
R. Hemos decidido qué vamos a hacer a corto plazo. El resto de medidas están anunciadas en el propio documento, y en él no van medidas de más recortes.
P. ¿Descartan entonces una bajada lineal a seis meses vista?
R. No consideramos ninguna medida de esa naturaleza.
P. ¿Cómo valora el nuevo SPR y la posible desaparición de principios activos, como ya se comenta que ocurrirá con la amoxicilina?
R. No lo comparto. No va a producirse ninguna desaparición de principios activos en el mercado. Va a haber proveedores de esos productos. Con total seguridad.
P. ¿Los cambios aprobados en el SPR van en contra de algunas de las reivindicaciones del sector de genéricos?
R. En España tenemos un sistema con genéricos como tal en el mercado y medicamentos sin patente, que no son genéricos técnicamente, pero que están en el mercado a precios de genéricos. El volumen de medicamentos a precio de genérico es muy alto.
P. ¿Bajar más esos umbrales busca una rebaja de los precios?
R. Eso ya está operando en el mercado. Es muy importante recordarlo. Ya existe.
P. ¿Preocupa en el Ministerio de Sanidad el posible desabastecimiento por el hecho de que las compañías que marquen el precio menor no tengan capacidad suficiente de suministro?
R. No creemos en absoluto que se vaya a producir desabastecimiento de ningún producto.
P. Tema de descuentos. ¿No se entorpece una relación comercial entre particulares?
R. Pero estamos hablando de un sistema regulado. Quien entra sabe que se rige por unas reglas de ese juego. No dudo que esos acuerdos particulares son legales y transparentes, pero, ahora bien, están dando lugar a descuentos muy altos, de hasta el 70 por ciento. En ese contexto, si estamos en una situación de dificultad para la sostenibilidad, no tiene sentido que en un sistema regulado, si es posible que los proveedores vendan a un precio menor, el precio oficial sea más alto. El propio sector no quiere un sistema liberal y reconoce que estos descuentos existen. Esos descuentos no deben quedar en el bolsillo de los agentes, sino redundar en el propio sistema.
P. El diferencial entre el descuento entre genéricos y los de marca, ¿es la única medida que puede incentivar cara al farmacéutico el uso de genéricos?
R. Por supuesto.
P. ¿Se va a modificar la obligatoriedad de dispensar genéricos?
R. Ahí no se toca nada.
P. ¿Cómo valora los cambios introducidos en el RD 5/2000?
R. La modificación va a dar respuesta a reivindicaciones tradicionales de la profesión. Se va a modificar tanto el escalado como el margen fijo para medicamentos con precio superior a 90 euros.
P. ¿Qué opina de las críticas de improvisación que se han vertido sobre el Ministerio de Sanidad?
R. El origen de las medidas está en una situación económica de crisis internacional, con una concreción en el caso español de una disminución de ingresos fiscales que obliga a plantear una serie de reformas y están enmarcadas en una hoja de ruta.
P. ¿Estas medidas tienen recorrido en el futuro o pueden revertirse si mejora la situación?
R. No habrá reversión, porque hablamos de medicamentos no protegidos por patente.
P. ¿Cree que se deberían haber aceptado de mayor grado propuestas estructurales, con plazos y espacios definidos?
R. Las reflexiones a las que aludes, como puede ser el copago o subida de impuestos, no son razonables en este momento. ¿Cómo va a ser Sanidad quien plantee estos temas cuando en el Parlamento de están peleando por estas cuestiones? Sanidad no puede introducir estos debates, no es coherente. Hay que saber cuándo y cómo hay que plantearlos. En cuanto al copago, además, no soluciona estructuralmente la sostenibilidad del sistema. Ningún país que tiene copago tiene resuelto los problemas estructurales de financiación, y sobre todo los que están asociados a los efectos de la crisis económica que han bajado ingresos de manera importante en todas las administraciones.
P. ¿Cree entonces que el copago no es válido ni cómo elemento moderador de la demanda?
R. Eso en mi opinión parte de una premisa falsa. Cuando una persona va al médico, éste le puede dar o no el tratamiento por razones clínicas, no porque se lo pida el ciudadano. Lo que puede hacer el copago es incrementar ingresos. Para moderar la demanda tienes que poner un copago alto, y si haces eso corres el riesgo de que deje de acceder a un servicio. Por mucho copago que pongas tú no arreglas el problema estructural de financiación, puedes incorporar más financiación pero cuanto más alto es el copago más expulsas del sistema a quien más pueda necesitarlo. Independientemente de eso, yo todavía no tengo ninguna propuesta de copago encima de la mesa por parte de ningún partido político.
P. ¿Qué destacaría de los acuerdos del Interterritorial?
R. Lo más relevante es recordar que se trata de una hoja de ruta pactada que trata de reformas para hacer sostenible el sistema en el futuro con los mismos niveles de eficacia que hemos alcanzado en los últimos años. Combinamos para ello medidas a corto y medio largo plazo que son a su vez medidas de eficiencia y control del gasto con medidas de cohesión
P. La disminución de las listas de espera supone un gasto, ¿no va contra esa reducción de los gastos que pretenden estas medidas?
R. La disminución de las listas de espera es un derecho de los ciudadanos. Ya hablaremos con un criterio de austeridad. Ya iremos haciendo las medidas para que sean factibles desde el punto de vista económico. El Ministerio de Sanidad y Política Social ha hecho un ejercicio de responsabilidad por aliviar las facturas farmacéuticas de las autonomías y por mantener la dinámica del consenso entre Estado y autonomías
P. ¿Qué posición ha jugado el sector en el acuerdo?
R. Durante el periodo de reflexión que hemos tenido durante el Pacto de Sanidad se han recibido propuestas que se han puesto o pondrán sobre la mesa. Es lógico que genere incertidumbres en las compañías.
“Esto no es una medida aislada ni caprichosa. Es consensuada y busca, tras un análisis de la situación, mantener todos los medicamentos en el sistema sin tocar la calidad, porque se tocan medicamentos que no tienen patentes”. Con estas palabras puso en valor el secretario general de Sanidad, José Martínez Olmos, la decisión adoptada en el pasado Consejo Interterritorial de “no tocar los medicamentos bajo patente”, algo que el propio secretario general de Sanidad consideró “de un enorme valor”.
En un contexto internacional marcado por el envejecimiento poblacional, la progresiva cronificación de las enfermedades y el impacto creciente de las nuevas tecnologías, el propio sector, según Martínez Olmos, “valora de manera extraordinariamente positiva que no se haya tocado la innovación”, aún tratándose, como en este caso, de unas “medidas duras” que les impactan.
A juicio del número 3 del Ministerio de Sanidad y Política Social, esta actitud es también una manifestación de la confianza de los agentes del sector farmacéutico en el Gobierno. “Nosotros vamos a mantener siempre un discurso de mantener la innovación, de no tocarla, y el acuerdo que ya el año pasado propuso Farmaindustria de cooperación y de esfuerzo en inversión, desarrollo e innovación es un ejemplo. Y nosotros debemos mantener ese espíritu. Un espíritu que en mi opinión expresa un grado de responsabilidad por parte del sector y confianza en el Gobierno”, aseguró el secretario general de Sanidad.