domingo, 22 de febrero de 2009 h
Laura González. En época de crisis, no todas las cifras son malas: las de Merck, por ejemplo. La multinacional alemana ha alcanzado los objetivos que se propuso para 2008, que en el caso de su filial española se han visto refrendados con un crecimiento del 6 por ciento. Pero no hay que relajarse. El fantasma de la morosidad y el descenso del consumo obligan a estar atentos al mercado.