Tras cerrarse 2012 sin apenas movimientos al respecto, el inicio del nuevo año parece haber despertado por fin la sensibilidad de las administraciones regionales hacia sus farmacias con viabilidad económica comprometida (VEC) y se ha producido un notable incremento de autonomías que han puesto en marcha las compensaciones a este tipo de boticas que fija el RDL 9/2011. Si el año pasado apenas cinco regiones habían hecho efectivas estas ayudas (Extremadura, Navarra, Galicia, Castilla-La Mancha y La Rioja), en estos primeros meses de 2013 ya se han sumado Cantabria, Aragón y Castilla y León.
Aproximadamente medio millar de farmacias VEC nacionales (ver mapa) ya están beneficiándose o pueden solicitar estas compensaciones económicas a su baja facturación. No obstante, el retraso que acumula la puesta en marcha de estas ayudas en el resto de comunidades autónomas propicia que todavía se trate de una cifra baja y muy alejada de las previsiones iniciales que apuntaban a 2.800 farmacias nacionales susceptibles de recibirlas. No parece por tanto que, aunque en el futuro se sumen el resto de autonomías, se puedan alcanzar estas cifras previstas.
¿El motivo? Los colegios farmacéuticos apuntan al establecimiento de unos umbrales demasiado bajos (una facturación mensual inferior a 12.500 euros). “Hay muchas farmacias que se encuentran en concurso de acreedores y, en cambio, no pueden acogerse a estas ayudas”, indica Vicente Jairo Álvarez, presidente del COF de Orense. Al margen del número de farmacias beneficiarias, Álvarez cree que estas ayudas “son absolutamente insuficientes”. Su homólogo del COF de Guadalajara, Ignacio Romeo, las califica también de “testimoniales”.
Orense es un ejemplo de la denuncia de Álvarez, ya que, a pesar de contar con numerosos municipios rurales, solo dos farmacias presentan una facturación por debajo del umbral que limita estas ayudas. La situación se repite en toda Galicia, donde la cifra de boticas beneficiarias no llega a la decena. En Cantabria, más de lo mismo, donde “solo un 3 por ciento de nuestras farmacias están dentro del umbral”, dice la presidenta de su colegio farmacéutico, Marta Fernández-Teijeiro.
Castilla y León se suma
Castilla y León ha sido la última región en poner en marcha estas ayudas económicas a la baja facturación. Tras mantener un encuentro el pasado 8 de febrero con Carmen Peña, presidenta de los farmacéuticos españoles, Jesús Aguilar, su homólogo del Consejo castellanoleonés de Farmacéuticos, y al que también asistió Juan Herrera, presidente de la Junta, su consejero de Sanidad regional, Antonio Sáez, anunció que a partir de marzo aquellas boticas con una facturación anual inferior a 200.000 euros podrán solicitar estas ayudas, también con carácter retroactivo desde 2012.
Las previsiones del consejero castellanoleonés apuntan a que un 15 por ciento de boticas regionales podrán beneficiarse de la medida, lo que situaría la cifra en torno a 200 farmacias beneficiarias. “Estas ayudas permitirán dar oxigeno y estabilidad a unos establecimientos que ya han visto reducidos sus beneficios por diversas medidas”, indicó Sáez tras el anuncio. Peña añadió que “hay que potenciar y proteger este tipo de farmacias por su papel social y sanitario”.
A pesar de estos últimos impulsos, aproximadamente en la mitad de regiones (ocho de 17) aún no hay rastro de estas ayudas. En algunas, como Cataluña, podrían desarrollarse de forma inminente. “Lo estamos ultimando con la subdirección general de Farmacia y no creo que se demore más allá de dos meses”, vaticina Jordi de Dalmases, presidente del Consejo Catalán de COF. También en Comunidad Valenciana se está trabajando en el decreto autonómico que las regulará y la consejería de Sanidad ya tiene destinada una partida para compensaciones “en torno a los 4,5 millones de euros”, confirma Jaime Carbonell, presidente del COF de Alicante.