La filial de Novartis quiere recuperar el espacio perdido en los últimos años
La farmacéutica ahorrará costes en todo menos en calidad, desarrollo y personas
Carlos Arganda
Madrid
Fernando Mateus lleva poco más de tres meses al frente de Sandoz en España, pero ya tiene claro cuál es su objetivo: alcanzar el tercer puesto en el ranking del mercado de genéricos en España. Lo tiene difícil, ya que en los últimos años, según reconoce él mismo, la compañía “ha estado mirando hacia adentro”. Este hecho ha dado como consecuencia que Sandoz haya perdido “un buen pellizco” de la cuota de mercado que disfrutaba. No obstante, para Mateus ha llegado el momento de reaccionar y acometer un camino de éxito que permita acercarse a los líderes del mercado, algo que ya ha empezado y que ha permitido que en septiembre la filial de Novartis registrase un crecimiento del 22 por ciento con respecto al mismo mes de 2009.
La receta es sencilla para el director general de Sandoz, aunque sea de difícil ejecución, ya que, según él, tendrán que “anticipar las necesidades del paciente”. Y para lograrlo, deberán “acercarse a médicos y pacientes”. Además, una de las fortalezas con las que cuenta el gigante de genéricos, y que le ayudará a lograr ese objetivo, es su posición en el mercado de los productos biosimilares. Un ámbito en el que, según Mateus, Sandoz es una de las pocas compañías con experiencia propia que le hace estar en disposición de afrontar con mayores garantías de éxito “un mercado que va a cambiar”.
En cualquier caso, Mateus pide estabilidad en el sector para permitir una industria fuerte, de modo que se evite que la erosión de los precios “pueda comprometer la calidad” de los productos. Una línea roja que Sandoz nunca sobrepasará, ya que prefieren “dejar de vender” ese producto.
No obstante, Sandoz tiene un plan de austeridad, con el objetivo de reducir costes de producción y poder ser más competitivo. Un plan que se asienta en reducir todos los costes que no comprometan ni la calidad ni el desarrollo ni las personas que trabajan para la compañía, en las que “se invierte mucho”.
Por otro lado, el director general de la compañía destacó la importancia del sistema de patentes, sin el cual “se acabarían las inversiones” de la industria farmacéutica, y destacó que la presión por el final de los periodos de protección provoca la necesidad de desarrollo de nuevos medicamentos.