La Consejería de Sanidad de Canarias se quedará sin presupuesto para abonar a sus farmacias las últimas facturas del año; presumiblemente, las correspondientes a las recetas dispensadas en octubre y noviembre próximos. Puede parecer que esta información es antigua, de 2011, 2012 o 2013. No es el caso. “Este 2014 será el cuarto año consecutivo que el presupuesto para el pago de recetas se agotará sin cubrir todo el ejercicio, lo cual ya no nos sorprende y avisamos de ello cuando conocimos la cuantía destinada a esta partida”, confirma Juan Ramón Santana, presidente del Consejo Autonómico de Colegios de Farmacéuticos de Canarias y del COF de Las Palmas. Quien avisa (la farmacia canaria) no es traidora sino, en todo caso, perjudicada.
Desde la consejería de Sanidad regional se ha corroborado la falta de liquidez, si bien esperan que lo que resta en caja alcance para el abono de septiembre “y parte de octubre”. ¿A partir de ahí? “Se negociarán soluciones con los colegios farmacéuticos”, se indica desde el departamento que dirige Brígida Mendoza. Por su parte, Santana confirma que ambas partes ya se han puesto ‘manos a la obra’ para encontrarlas y evitar así que las farmacias canarias sufran otra vez la lacra de los impagos tras vivir apenas unos meses de tranquilidad. Y es que, cabe recordar, la Administración canaria puso el contador de la deuda ‘a cero’ el pasado mes de febrero tras 26 mensualidades de retrasos ininterrumpidos en el abono de recetas (desde enero de 2012). “Arrastramos un desfase presupuestario que provoca que a finales de cada año se repita la misma situación”, expone Santana.
El presidente de los farmacéuticos canarios recuerda que “queremos saber qué propone la Consejería” ya que, “si no tenemos un calendario de pagos concreto, los colegios tampoco podemos abrir nuestras propias vías como, por ejemplo, negociar anticipos con las entidades bancarias”.
Cataluña y Comunidad Valenciana
En el caso de las farmacias de Cataluña y Comunidades, el periodo estival no ha variado la espiral cíclica en la que se mueve el pago de recetas en estas regiones, por el cual sus administraciones abonan una mensualidad pendiente para, apenas días después, engrosar una factura más en la deuda. O viceversa.
De esta manera ha transcurrido el verano en la farmacia catalana. El 30 de julio, el Catsalut abonaba 115,8 millones de euros correspondientes a la factura atrasada de mayo. Días después, el 5 de agosto, incumplía la obligación que le marcaba el concierto regional de abonar en dicha fecha la factura de junio (110,7 millones de euros), que finalmente sufragó el pasado día 28. No obstante, este 5 de septiembre el Catsalut debería abonar —según concierto— las recetas dispensadas en julio (119,7 millones), lo cual no es previsible que ocurra y, por ende, volverá a abrirse la deuda. Por ello, según se recuerda desde el Consejo de Colegios de Farmacéuticos de Cataluña, “continuarán sufriendo una media de 25 días de retraso y cobrando los medicamentos aproximadamente dos meses después de haberlos dispensado”.
Muy parecida es la situación que acontece en las farmacias de Comunidad Valenciana. Tras recibir a finales de julio 95 millones de euros correspondientes a la factura de mayo, el 28 de agosto recibieron vía FLA el 60 por ciento de junio y el otro 40 por ciento con fondos propios de la Generalitat. No obstante, en condiciones normales, los farmacéuticos valencianos deberían estar cobrando en estas fechas la factura de julio, que presumiblemente será abonada a finales de septiembre, con lo cual se mantiene un mes de retraso.
