alberto cornejo
Madrid
Pregunta. ¿Cuáles ha sido los principales motivos por los que presentó su candidatura a la Vocalía Nacional de Dermofarmacia?
Respuesta. Se juntan dos factores, como son mi gusto por este campo y mi experiencia en él. Acumulo seis años como vocal de dermofarmacia en el COF de Vizcaya y he colaborado asiduamente con la vocalía nacional. También creo que se pueden hacer cosas nuevas en esta vocalía.
P. ¿Cuáles son esas cosas nuevas que se pueden hacer?
R. No pretendo grandes cambios, puesto que la labor de Ana Aliaga a lo largo de los últimos 12 años ha sido estupenda y la dermofarmacia en España le debe mucho. Pero sí creo posible introducir nuevos matices. Así, veo posible hacer un mayor uso de Portalfarma, la web del Consejo, como herramienta de formación y comunicación entre las vocalías provinciales. También considero importante revisar los criterios de asignación de los códigos nacionales (CN) para productos cosméticos, siendo más exigentes en los requisitos.
P. ¿Y sus propuestas en torno a la formación profesional en este campo?
R. En los tiempos actuales se debe potenciar la formación en marketing, merchandising y ventas. Todo ello sin restar un ápice a la formación científica, que es nuestra esencia y que nos diferencia de otros canales.
P. Esa esencia no es otra cosa sino el consejo farmacéutico, ¿no?
R. Efectivamente, ése es nuestro principal aval y lo que nos hace, para bien, diferentes. De hecho, por este valor añadido no hemos sufrido un descalabro en las ventas de productos dermocosméticos a pesar de los tiempos de crisis.
P. En su programa también hay mención a la relación con otras vocalías nacionales.
R. Sí, especialmente en lo relativo a potenciar la comunicación y colaboración con las vocalías de Oficina de Farmacia y Alimentación. Tenemos muchos campos en los que coincidimos y, por tanto, tenemos que interrelacionarnos.
P. ¿Apostaría por la creación de un Bot-Plus exclusivo para productos dermocosméticos?
R. El Bot-Plus es una herramienta muy buena, de gran utilidad. A simple vista podría parecer una buena idea, pero no creo que sea posible a día de hoy, y tampoco comparable al Bot-Plus original. Son campos diferentes. Además, el CGCOF ya dispone de un catálogo de parafarmacia muy bueno, el cual ya está integrado dentro del propio Bot-Plus.
P. Entonces, ¿cómo se puede potenciar la cosmetovigilancia?
R. La cosmetovigilancia es un concepto promovido por Ana Aliaga, que ya tiene unas bases sólidas, como puede ser ese catálogo que acabo de mencionar. Además, contamos con la red de alertas para notificar cualquier incidencia como ocurre con los medicamentos. Simplemente, creo que hay que seguir potenciándolo. Por ejemplo, con esos mayores requisitos para los códigos nacionales.
P. ¿Cree en el concepto ‘Atención Dermofarmacéutica’?
R. Sí, al cien por cien. Me gusta como suena. Nosotros no podemos permitirnos el lujo de limitarnos a pasar por el lector el producto escogido por el cliente y cobrarselo sin más. Hay que corroborar que su adquisición es la adecuada en su caso, reconducir la misma si es necesario, completar la venta con el asesoramiento y resolver posibles dudas. Es fundamental la intervención en la venta.
P. Si accede a la vocalía, tiene a la vuelta de la esquina una nueva edición de las Jornadas Nacionales de Dermofarmacia, en septiembre en Palma de Mallorca. ¿Qué espera de ellas?
R. Sinceramente confío en que se pueda mantener el éxito de las anteriores ediciones, celebradas en Vizcaya y Vigo. Este evento es una oportunidad fantástica para reciclar y adquirir conocimientos. Hay que animar a los profesionales a que participen.