COF y Consejería han firmado el “histórico” documento que desarrollará la retribución de servicios adicionales

“Este acuerdo nos permite no depender en exclusiva de la machacada vía de los márgenes”, celebran en los COF

| 2010-09-10T16:46:00+02:00 h |

alberto cornejo

Barcelona

La cartera de servicios remunerada ha dejado de ser un concepto hipotético, un viejo sueño de las oficinas de farmacia, para convertirse en realidad. Al menos en la comunidad autónoma de Cataluña, región que no es la primera vez que lidera un cambio en la profesión. A este respecto, cabe destacar que las farmacias catalanas tendrán el honor de haber traspasado por primera vez esta línea entre sueño y realidad, tras el reciente acuerdo alcanzado por su Consejo Autonómico de Colegios Oficiales de Farmacéuticos con la Consejería de Salud para que, de aquí en adelante, ciertos servicios adicionales que ya prestan o prestarán estos establecimientos sean recompensados económicamente.

Los protagonistas dejaron los deberes hechos antes de las vacaciones, aunque es ahora cuando ha trascendido la noticia. Fue el 26 de julio cuando se firmó el documento marco sobre el que girará esta cartera de servicios remunerada y con el que llegaban a buen puerto las negociaciones mantenidas durante meses al respecto. En el documento se distingue entre “servicios básicos” (relacionados con la custodia, dispensación y elaboración de medicamentos, farmacovigilancia y promoción de la salud), sin retribución adicional, y “servicios acreditados”, los cuales deberán acordarse entre CatSalut y colegios catalanes y que sí estarán retribuidos.

Dentro de esta última categoría, se encuentran “todas aquellas actividades de prevención de la enfermedad, intervenciones para la mejora de la adherencia terapéutica, seguimiento farmacoterapéutico e intervenciones de cooperación con la Farmacia Hospitalaria”, según enumera el acuerdo. De momento, se trata de conceptos generales que una Comisión Mixta de Seguimiento formada por representantes de la consejería y el Consejo Catalán de COF se encargará de desarrollar y traducirlos en programas o actuaciones concretos para su inmediata puesta en marcha.

Desarrollo

Esta comisión jugará un papel fundamental en el desarrollo de esta cartera de servicios. Así, deberá reunirse “de forma trimestral”, según las condiciones del documento marco, para el estudio de nuevos servicios a incluir en esta cartera remunerada. Además, este órgano será el encargado de decidir la financiación concreta de cada uno de ellos (ya se ha fijado una dotación económica total para esta cartera, aunque no ha querido ser desvelada por las partes). “En la reunión de julio ya se habló de algunos servicios concretos que ya comenzarán a ser retribuidos antes de final de año”, comentó Carles Conejero, presidente del Colegio Oficial de Farmacéuticos de Gerona.

Sin embargo, no todo vale ni todo servicio adicional será retribuido. Esta premisa ha estado muy presente en las negociaciones. Por ello, antes de proceder a la inclusión en la remuneración de todo nuevo servicio, deberá efectuarse una prueba piloto previa que confirme su efectividad. Incluso, si los resultados posteriores tras su implantación y desarrollo no fuesen los esperados “hay un acuerdo por el cual se devolvería la dotación económica asignada en origen para la remuneración de las farmacias participantes en ese programa si no cumpliese sus objetivos”, anticipó el presidente del colegio gerundense.

Respecto a las farmacias que deseen participar en estos proyectos, deberán someterse previamente a un proceso de acreditación. “Queremos que todas nuestras farmacias pueda ser partícipes de este histórico acuerdo, por lo que desde los colegios potenciaremos la formación necesaria para la consecución de la necesaria acreditación”, indicó Conejero.

No depender de márgenes

La satisfacción por haber sacado adelante esta cartera de servicios remunerada es total en el seno de los colegios catalanes. Si ya era una histórica reivindicación, las nuevas medidas de recorte contra las farmacias “la hacían aún mas necesaria”, indicó Andreu Suriol, presidente del COF de Tarragona.

El parecer de Suriol es compartido por su homólogo gerundense. “Es una satisfacción que nuestras farmacias ya no tengan que depender exclusivamente de los márgenes”, precisó Conejero. Una vía, la de los márgenes, que para Suriol “está siendo sumamente machacada”, por lo que celebró que “la cartera de servicios remunerada nos libere en parte de esta atadura”.

No obstante, desde estos organismos se recordó que la finalidad de este acuerdo no era abrir “nuevas vías de negocio”, sino “profesionalizar” una serie de servicios comunes y supervisados, con la necesaria retribución económica para su viabilidad.

Las guardias deben esperar

Cuando se iniciaron las negociaciones para el documento recién firmado también se planteó la posibilidad que las guardias farmacéuticas se incluyesen dentro de esta cartera de servicios y, por tanto, también se procediese a su remuneración. Sin embargo, por el momento estos servicios de urgencia han quedado al margen del acuerdo, “pero se sigue estudiando la viabilidad de su retribución”, confirmó Suriol.

En este sentido, la consejería ha pedido un mayor plazo para el estudio de un futuro pago de estos servicios o, como mal menor, su reestructuración. “Aún no se ha descartado ninguna de estas opciones, pero sí se ha decidido plantearlo de forma independiente al acuerdo sobre la cartera de servicios remunerada”, concluyó el presidente tarraconense.

El final del ‘todo gratis’

“Sí queremos, pero no podemos”. Esta valoración del presidente del Consejo Autonómico de COF castellanoleoneses, Jesús Aguilar, resume el sentir actual de la profesión respecto a la implantación de nuevos servicios en las oficinas de farmacia nacionales. Es decir, los farmacéuticos ni se han negado ni se niegan ni se negarán a aumentar sus responsabilidades de cara a la salud de la población, pero en el contexto actual, con muchas farmacias al borde de la supervivencia, ni son ni serán posibles si no son recompensados. “No se puede pedir al farmacéutico que soporte unos servicios que económicamente son insoportables”, prosigue Aguilar.

Un parecer que comparte su homóloga del COF de Valencia, María Teresa Guardiola. “No creo que haya ni un sólo farmacéutico que no desee aumentar sus competencias o papel en la salud de la población, pero a día de hoy, la reivindicación de la parte profesional debe ir obligatoriamente unida a las reivindicaciones económicas”, manifiesta. En este sentido, en Cataluña se acaba de poner fin al “todo gratis”. Un claro ejemplo para la esperanza para el resto de compañeros nacionales, que todavía consideran una quimera una posible cartera de servicios remunerada en su autonomía.

Los últimos RDL, 4/2010 y 8/2010, y el descenso de la rentabilidad de las farmacias que su entrada ya notan, han propiciado que las posturas en los colegios farmacéuticos se extremen. Ya no es posible “dar sin recibir”. Es el caso de Andalucía, donde Manuel Arenas, presidente del Consejo Andaluz, reconoce que habían surgido conversaciones con la consejería para ampliar los servicios a realizar por las farmacias que, tras conocerse estas nuevas medidas, “han quedado completamente paralizadas”. ¿Cómo reconducirlas? “Sin duda, poniendo sobre la mesa la opción de remunerarlos”, indica Arenas. No obstante, desde estas instituciones esperan que el paso dado en Cataluña pueda provocar un ‘efecto rebote’ en sus regiones.