A pesar de que el gasto total por habitante de las comunidades autónomas creció entre 2003 y 2013 un 32 por ciento y que el gasto sanitario per cápita lo hizo en un 38,4 por ciento, la inversión en Farmacia a través de recetas no tuvo la misma evolución, ni mucho menos. En ese mismo periodo, su cuantía ha caído un 6,1 por ciento, lo que supone que mientras que en 2003 las comunidades autónomas dedicaron a cada uno de sus habitantes un total de 209,6 euros a sufragar la compra de medicamentos en oficinas de farmacia, esta cantidad se vio reducida en 2013 hasta los 196,7 euros.
De este modo, mientras que en 2003 las comunidades autónomas dedicaban un promedio del 8 por ciento de sus gastos a Farmacia, esa cifra se ha visto reducida en 2013 hasta solo el 5,69 por ciento del total de gastos autonómicos. Esto supone que el peso de las recetas sobre los gastos autonómicos ha caído un 28,9 por ciento.
No obstante, cabe señalar la gran diferencia de esfuerzo que realizan las regiones para afrontar la factura farmacéutica. En 2003 la Comunidad Valenciana dedicó el 11,63 por ciento de su presupuesto a Farmacia. En ese mismo año, Navarra invirtió solo el 4,45 de todos sus gastos. Once años más tarde los protagonistas de este particular ranking no han cambiado, aunque las cifras sí que se han reducido considerablemente. La región mediterránea dedicó en 2013 el 8,57 por ciento de sus gastos a Farmacia, mientras que los navarros lo hicieron en un reducido 3,1 por ciento.
También es importante destacar las grandes diferencias existentes en la inversión en Farmacia per cápita en las distintas comunidades autónomas. En 2003, la Comunidad Valenciana era la que más dedicaba a cada paciente en su gasto de recetas. En concreto, pagó en ese año 246,72 euros por cada uno de sus más de 4,4 millones de habitantes. En el lado contrario, se situó la Comunidad de Madrid, que pagó 158,67 euros para cada uno de los 5,7 millones de personas que conformaban su población. En 2013 las diferentes entre el que más y el que menos dedica a recetas per cápita se han mantenido prácticamente en las mismas magnitudes, aunque han cambiado los protagonistas. Extremadura gastó 252,54 euros por paciente en recetas durante el pasado año, mientras que las Islas Baleares dedicaron 155,47 euros. Madrid, le sigue de cerca con 156,4 euros por paciente en Farmacia.
En este sentido, cabe destacar que en este periodo trece autonomías han reducido el gasto por paciente en Farmacia. Algunas como Comunidad Valenciana, Navarra o Cataluña, en más de un 10 por ciento. Por contra, solo cuatro (Cantabria, Extremadura, Galicia y País Vasco) han visto crecer el gasto per cápita destinado a Farmacia.
Gasto farmacéutico sobre sanitario
Fruto de esta reducción de gasto en la factura farmacéutica se produce una importante rebaja en el porcentaje de gasto sanitario que se dedica a recetas. En concreto, en 2003 las comunidades autónomas dedicaron el 23,1 por ciento de media, mientras que en 2013 esta participación bajó hasta el 15,7 por ciento, una reducción del 32,2 por ciento. Por comunidades autónomas, las que más han reducido el peso de la Farmacia en el total de gastos sanitarios han sido Castilla-La Mancha y Cataluña, con una reducción del 41,2 y 45,1 por ciento respectivamente. La primera pasó de dedicar a Farmacia el 26,5 por ciento de sus gastos sanitarios a solo el 15,6 por ciento, mientras que la segunda lo hizo desde un 23,7 a un 13 por ciento. No obstante, la región catalana no es la que menos porcentaje de gasto sanitario dedica a farmacia. Le ganan Madrid (12,6 por ciento) y Navarra (11,9 por ciento).
En el lado contrario, se encuentra Galicia, que dedica el 20,6 por ciento de sus gastos sanitarios a Farmacia, seguida de Extremadura (19,0) y Andalucía (18,8).
En estos años, el esfuerzo de las comunidades autónomas en sanidad per cápita, se ha mantenido estable y ha crecido ligeramente al pasar de suponer el 34,57 por ciento de los gastos en 2003 al 36,23 por ciento en 2013. De este modo, en la actualidad, las regiones gastan en cada paciente una media de 1.253 euros, mientras que en 2003 esa cifra se quedó en 905 euros. No obstante, las diferencias entre las que más invierten y las que menos son enormes. Así, de los más de 6.000 euros por habitante que gasta Navarra, dedica a Sanidad 1.557 euros. Por el contrario, la Comunidad Valenciana gasta en cada uno de sus pacientes 1.211 euros en Sanidad.