El gasto sanitario podría reducirse más de un 50% con estrategias de prevención

Publicitarios y genéricos subrayan su papel potencial de ahorro para el SNS

| 2009-08-30T18:17:00+02:00 h |

carlos b. rodríguez

Madrid

Salud y economía son temas muy vinculados, no hay más que mirar los datos mensuales del gasto farmacéutico. Pero hay más ejemplos: prevención, asistencia sanitaria, la I+D+i, gastos derivados de los nuevos derechos y políticas sanitarias… Y es que, una mala gestión en un área puede repercutir negativamente en otras. En un momento en el que el gasto sanitario representa más del 30 por ciento en los presupuestos regionales, la necesidad de racionalizar los recursos es cada vez mayor.

Así lo pusieron de manifiesto los especialistas en distintas materias que asistieron al Foro Salud y Economía organizado este verano por la Universidad de Jaén. Un curso que buscaba fomentar y sentar las bases de un estudio para obtener reflexiones de un equipo multidisciplinar, que incluye administraciones y toda la cadena del medicamento, y pasa por el propio individuo. ¿La conclusión? Racionalizar el gasto sanitario es cosa de todos.

Publicitarios y genéricos

Desde el punto de la asistencia sanitaria el acento está en la prevención. El coste actual en materia de Sanidad, dicen los expertos, se podría reducir a más de la mitad de los presupuestos actuales si se impulsaran estrategias preventivas entre la población. Médicos de distintas especialidades incidieron en ello, aunque es una actividad que no es ajena a la farmacia. Así lo expuso José Manuel Arias de Saavedra, presidente del COF de Jaén, quien recordó que “dos millones de habitantes pasan a diario por las farmacias del país”.

Las farmacias tienen otro gran papel a la hora de contribuir a la sostenibilidad del sistema sanitario y reducir la factura farmacéutica. Esta tarea, vinculada con la industria del autocuidado de la salud, permite liberar recursos sanitarios que pueden destinarse a nuevas coberturas, reducción de listas de espera… No obstante, ofrece un mercado que en 2009 todavía no ha logrado los objetivos con los que los medicamentos publicitarios nacieron en 1981.

Las razones son, entre otras causas, según Jaume Pey, presidente de Anefp, la actitud “poco proactiva en ocasiones” del farmacéutico hacia estas especialidades, la escasa educación de un consumidor más acostumbrado al ‘todo gratis para todos’, los escasos recursos humanos dedicados por la Aemps o las restricciones en materia de publicidad.

En 2008 el mercado de los medicamentos publicitarios bajó un 5,1 por ciento en unidades y un 1,1 por ciento en valores. “Si fuera el Ibex 35, no invertiría”, dijo Pey, que añadió que la sustitución de un 5 por ciento de los medicamentos de prescripción que se utilizan para síntomas menores significarían un ahorro de 1.200 millones de euros anuales, además de liberar 22 horas a cada médico.

Una situación similar arrastra el mercado de los genéricos, que en diez años han conseguido un ahorro de 10.370 millones de euros, con una media de consumo del 4,7 por ciento entre 1999 y 2008.

España está todavía muy lejos del 12 por ciento de consumo medio de la Unión Europea, y el sector así lo puso de manifiesto en Jaén. “Si en los próximos años la media de consumo de genéricos fuese del 9,9 por ciento, el ahorro entre los años 2009 y 2012 sería de 16.400 millones de euros”, aseguró Luis Barrio, representante de Ratiopharm.

La visión de los gestores

El papel de las comunidades autónomas en la gestión de la sanidad y su impacto socio-económico también tuvo un hueco en la agenda del Foro. En sus intervenciones, las consejeras de Salud de Cataluña, Canarias y Galicia, Marina Geli, Mercedes Roldós y Pilar Farjas, respectivamente, hicieron hincapié en la urgente necesidad de tomar medidas para que el Sistema Nacional de Salud no pierda equidad, cohesión y calidad.

Entre peticiones a que se retome el pacto sanitario en septiembre, las tres consejeras sugirieron una batería de propuestas de mejora del Sistema Nacional de Salud. En este sentido, la consejera canaria se refirió a la necesidad de garantizar la asistencia sanitaria gratuita de la población, de aumentar el gasto sanitario público en un 1 por ciento del PIB y de compensar a las comunidades que han perdido financiación por la no actualización de las variables del sistema aún vigente.

Farjas, por su parte, abogó por impulsar “intervenciones rápidas” para invertir la tendencia de “insatisfacción y desmotivación” de los profesionales sanitarios y apostó por conseguir su implicación con el sistema y colocar al paciente como el eje del mismo.

El doble precio de los medicamentos