El PSOE registra una iniciativa para escuchar la opinión de los grupos sobre la PDD

Gripe y dependencia, los otros temas destacados de la comparecencia de Jiménez

| 2009-05-24T18:25:00+02:00 h |

carlos b. rodríguez

Madrid

Extremadura es partidaria de dar gratis la ‘píldora del día después’ (PDD), siempre que se haga bajo prescripción. La Comunidad Valenciana no tomará ninguna decisión si no se convoca un Interterritorial. Madrid la dispensará en centros de salud… Todo ello, sumado a las críticas de médicos y farmacéuticos, podría generar el primer efecto secundario de la dispensación en farmacias en la propia ministra de Sanidad y Política Social, Trinidad Jiménez, que tampoco encontró aliados en el Congreso. Tanto que, ante la polémica generada, el PSOE ha tenido que registrar una iniciativa en la Cámara Baja para discutir sobre esta medida “tranquilamente y para que se vea la posición de los grupos”, según anunció su portavoz en la Comisión de Sanidad, Pilar Grande.

Muchas expectativas generaba la segunda comparecencia de Jiménez en el Congreso, siete semanas después de asumir su cargo. Aunque su actuación y la nueva estructura del ministerio recibió la felicitación de todos los portavoces, su intervención y la de los grupos de la oposición dejaron de lado muchos asuntos para centrarse en tres: la píldora postcoital, la Ley de Dependencia y la gripe A.

Crear un mapa sociosanitario es uno de los ejes del nuevo equipo ministerial, y el discurso de Jiménez hiló con bastante éxito ambos puntos. No obstante, por el pacto sanitario pasó la ministra de puntillas, sin avanzar novedad alguna, así como en asuntos relativos a la política farmacéutica, una de las áreas competenciales claras de un ministerio que buena parte de su labor debe destinarla a cohesionar un SNS descentralizado.

Sí mencionó Jiménez, en cambio, esa visión del sistema sanitario como “uno de los sectores con mayor futuro para la economía y el empleo”, de gran importancia en la coyuntura actual. Y en el contexto de la inversión de la sanidad pública (63.000 millones de euros) y el empleo que genera (1,2 millones de personas), situó la ministra la respuesta de Farmaindustria al llamamiento del Gobierno para mantener intactas las prestaciones sociales. “Ese compromiso pone de manifiesto el potencial del SNS para ofrecer salidas válidas en la actual coyuntura económica, sobre la base de potenciar un nuevo modelo productivo basado en la innovación, en la investigación y en la ciencia”, dijo.

Sin embargo, tampoco habló mucho de investigación, pese a los esfuerzos del ministerio para ser considerado parte de esta área transferida a Ciencia. El asunto se lo recordó el portavoz de Sanidad del PP en el Congreso, Mario Mingo, que pidió a la ministra que haga todo lo posible para recuperar todo lo relacionado con la investigación, las nuevas tecnologías, la Escuela Nacional de Sanidad y la epidemiología.

Gripe y dependencia

En el contexto de la gripe A, esa petición alcanza una relevancia considerable, así como la de que España disponga de una planta de vacunas, aspiración común del PP y Sanidad. Más cerca, sin embargo, está el posible acuerdo público-privado consensuado en la reunión de la OMS en Ginebra, y al que también había instado el PP en una propuesta de resolución que pedía al Gobierno que iniciase las negociaciones necesarias con la industria farmacéutica. “Estamos a punto de firmar un preacuerdo con los laboratorios responsables de fabricar la vacuna a nivel europeo. El número será el que determinemos en el CISNS en función del acuerdo con el resto de comunidades”, dijo Jiménez.

En cuanto a Dependencia, las cifras son la arma del ministerio ante las críticas por su infra-financiación y sus dificultades de implementación. Un total de 932.000 personas han solicitado las ayudas desde que la ley entró en vigor, de las cuales el 625.000 (el 70 por ciento) tiene reconocido su derecho a percibirlas. Aun así, la ministra reconoció que falta mucho por hacer, pues de momento sólo 400.000 la reciben.