fRancisco rosa Madrid | viernes, 30 de noviembre de 2012 h |

La segunda tanda de datos presentada por el Instituto Nacional de Estadística (INE) en la Fundación Cotec avala el carácter eminentemente innovador de la industria farmacéutica. En este sentido, los laboratorios pueden presumir de que, durante el año más duro de la crisis, sus niveles de gasto en innovación tecnológica no solo no se redujeron, sino que experimentaron un ligero incremento (0,6 por ciento), al pasar de 1.108 millones de euros en 2010 a 1.115 millones en el pasado ejercicio.

Una de las consecuencias directas del comportamiento positivo en este ámbito es que el sector sigue instalado en la cuarta posición en la clasificación de las ramas de actividad empresarial que más invierten en innovación. Según los datos del INE, el gasto realizado por las empresas farmacéuticas representa cerca del 7,6 por ciento del total y, aunque sigue por debajo de otros sectores asociados tradicionalmente al desarrollo de procesos y productos novedosos, como la automoción o las telecomunicaciones, lo cierto es que es el único que ha experimentado una evolución positiva en el que para muchos ha sido el peor año de la crisis.

En cuanto a la distribución del desembolso realizado, cabe destacar que los laboratorios destinaron casi el 90 por ciento del total a la realización de I+D interna (56,7 por ciento) y externa (31,2 por ciento). Por lo demás, la inversión en maquinaria, equipos, hardware y software se llevó el 5,5 por ciento, y la introducción de las innovaciones en el mercado en torno al 3,4 por ciento. En este sentido, llama la atención que las empresas solo destinaran un 0,5 por ciento a la adquisición de conocimientos externos y un 0,2 por ciento en formación.

Por otro lado, es preciso señalar que, pese que el número de empresas que operan en el sector del medicamento disminuyó en un 3,5 por ciento (de 254 a 245), la destrucción de tejido industrial fue menor entre las empresas activas en materia de innovación, con una tasa de variación del -2,3 por ciento (de 173 a 169). La crisis y las medidas para paliarla provocaron que Cataluña y la Comunidad Valenciana perdieran dos compañías cada una, aunque en otras como Aragón o Andalucía aumentó en una unidad el número de laboratorios innovadores.

Es precisamente esta región del sur de España en la que más se incrementó el gasto de las empresas en nuevos procesos y productos. Concretamente, entre 2010 y 2011 aumentó un 539 por ciento, al pasar de los 1,2 millones de euros a ocho millones. Aunque sin duda la que destaca en este apartado es Cataluña. Por todos es sabida la alta presencia de compañías farmacéuticas, nacionales y multinacionales, en esta comunidad, la cual se tradujo en un gasto de 629 millones de euros en 2011. Eso sí, la cifra es inferior a la registrada en 2010, cuando se alcanzaron los 635 millones.