La factura farmacéutica de medicamentos dispensados con cargo al SNS correspondiente al mes de julio (119,7 millones de euros), que debería haber sido abonada a las farmacias catalanas según el concierto el pasado 5 de septiembre, tampoco se pagará a finales de este mes. ¿El motivo? Desde la consejería de Economía regional que dirige Andreu Mas-Colell se comunicó al CatSalut que la misma no había sido incluida en el Fondo de Liquidez Autonómico (FLA) para hacer frente a los pagos de la Generalitat de Cataluña este mes.
Este fue el mensaje que les hizo llegar el CatSalut a sus boticarios, y eso es lo único que saben los mismos, a la espera de que en la reunión que mantendrán el próximo 23 de septiembre con el director general de Política Financiera, Jordi Òliva, les den más explicaciones. “Solo sabemos que no hay dinero para pagar la factura de julio. Esperaremos al día 23 para saber qué plan de pagos hay previstos”, precisó a EG Josep Aiguabella, vicepresidente del Consejo Catalán de Farmacéuticos y presidente del Colegio Oficial de Farmacéuticos de Lérida.
¿Ha cogido por sorpresa a los farmacéuticos? “Sí, ha sido una sorpresa doble”, precisó Aiguabella. ¿Por qué? Según el presidente de los farmacéuticos leridanos, no preveían que se produjeran impagos este mes, sobre todo, porque “los farmacéuticos accedieron a cerrar 12 horas antes la facturación para que una cifra más baja garantizara a la Generalitat poderla incluir en el FLA”.
El anuncio de la Generalitat significaría incrementar de 25 a 55 días el retraso respecto a la fecha de factura (una media de dos meses desde la dispensación), algo que los farmacéuticos califican como “inadmisible”. Y es que, tal y como precisaron, “la Administración no puede volver a recurrir a los impagos para financiarse”, algo con lo que en el caso de los proveedores sanitarios se pone en riesgo, además, la calidad de los servicios que pueden ofrecer. “La salud tendría que ser un tema prioritario”, señalaron desde el Consejo Catalán, que defiende que este asunto se debatiese en el Parlamento catalán. “No afecta solo a los profesionales sanitarios sino al conjunto de ciudadanos y a la gestión de los recursos disponibles”, afirmaron.
Medidas y ‘rehenes’
¿Se tomará alguna medida de fuerza para exigir el pago? El Consejo Catalán como la empresarial catalana Fefac anunciaron que sería algo “a valorar” tras la reunión del 23 de septiembre. Sobre este particular, Aiguabella matizó que esperan “que no haga falta adoptar ninguna medida y se pueda buscar una salida a un problema derivado de los problemas de financiación de Cataluña”.
Cabe destacar que los farmacéuticos ya llevaron a cabo medidas de presión (manifestaciones y cierres patronales) en el pasado. Unas acciones que respondieron a una situación de irregularidades en el pago que desde 2011 sufren las boticas de esta comunidad. A este respecto, los farmacéuticos inciden en que llegaron a soportar hasta cuatro meses de deuda (noviembre de 2013), tras lo que la administración catalana se comprometió por escrito a abonar, aunque con retraso, una factura cada mes y a intentar saldar la deuda durante el 2014. “Hasta ahora se había cumplido el compromiso”, indican.
Por su parte, el presidente de Fefac, Antonio Torres, afirmó el nuevo retraso “implica una pérdida de la confianza y credibilidad en la Administración”. Asimismo, declaró que la Generalitat debería encontrar otra vía de financiarse que no fuera los impagos a proveedores. “Hasta ahora hemos intentado evitar usar al ciudadano como rehén, pero después del anuncio del nuevo impago no descartamos llevar a cabo medidas reivindicativas que afecten al servicio que prestamos a nuestros usuarios”, manifestó.
