Europa quiere salvaguardar la salud en el TTIP. Así consta en las orientaciones que constituyen la base sobre la que Jean-Claude Juncker ha sido elegido presidente de la Comisión Europea. Su objetivo es que la Unión Europea llegue a un “razonable y equilibrado” con los Estados Unidos que no “sacrifique” las normas europeas en los ámbitos de la salud, la seguridad o la protección social y de los datos.
Juncker ha resultado elegido presidente de la Comisión por 422 votos en la sesión plenaria del Parlamento Europeo. En su intervención previa a la votación ha presentado sus orientaciones políticas para la próxima Comisión Europea. El documento lleva por título ‘Un nuevo comienzo para Europa: mi Agenda en materia de empleo, crecimiento, equidad y cambio democrático’.
Entre las prioridades de Juncker se encuentra la presentación a corto plazo de un Paquete de empleo, crecimiento e inversión para generar un importe adicional de 300.000 millones de euros en inversiones durante los tres próximos años; así como ayudas a las Pymes comunitarias. También mencionó como “inaceptable” que los trabajadores y jubilados hayan tenido que soportar la carga de los programas de reforma estructural en Europa y esperó poder sustituir la “troika” por una estructura “dotada de mayor legitimidad democrática y evaluaciones de impacto social para todo nuevo programa de apoyo”.