La crisis sigue su curso, cruel, y promete dejar en la cuneta a los que no sepan adaptarse. Esta máxima darwinista es la que están aplicando los gestores y expertos del ámbito sanitario a la hora de plantear soluciones para garantizar la sostenibilidad del SNS, sostenibilidad que pasa, en gran medida, por el cambio en la relación que mantienen la industria farmacéutica y la administración.
Este fue el planteamiento que utilizó Juan José Güemes, presidente del Centro de Gestión Emprendedora del IE Business School, durante el XV Foro de la Industria Farmacéutica organizado por la escuela de negocios en colaboración con IMS Health. “La propuesta de valor de la industria tiene que cambiar, ya que la administración ha modificado su rol y ahora también interviene en la decisión de prescripción”, apuntó.
Por su parte, Gabriel Morelli, director general de IMS Health, redundó en la misma idea y planteó un nuevo modelo de colaboración que implica esfuerzos extra por parte de las compañías farmacéuticas si quieren ganarse la confianza de las autoridades. Este modelo implicaría la realización de propuestas para aportar soluciones integrales que sirvan para dar respuesta a las distintas patologías.
La idea es que, además de proveer los tratamientos para el abordaje de las enfermedades, las compañías se impliquen en la mejora de otros aspectos como la integración entre la atención primaria y la especializada, el desarrollo de programas de apoyo, el registro de datos y análisis, así como el control de la calidad de la asistencia y la prestación. “En estos ámbitos la industria también tiene mucho que aportar, dada la acumulación de experiencia”, explicó Morelli.
Según él, el principal obstáculo que pueden encontrar las partes interesadas para formalizar este tipo de acuerdos es la “falta de confianza” que existe hacia el prójimo, ya que “ambos dudan de poder establecer compromisos a largo plazo con la otra parte”, cuando este tipo de acuerdos requerirían para su correcta implementación periodos superiores a los diez años.
Morelli hizo referencia a algunas experiencias de este tipo que ya se han puesto en marcha en otros países. Es el caso de Holanda, que tiene un acuerdo con Novo Nordisk para el abordaje integral de la diabetes. A pesar de eso, ve complicado que este tipo de proyectos se pongan en marcha en España a corto plazo, “aunque la crisis y la competencia nos irán empujando en esa dirección”. “En todo caso, hay algunas regiones, como Cataluña, País Vasco y Comunidad Valenciana, que se muestran más abiertas a los nuevos modelos de colaboración”, dijo.
Influencia de las TIC
Por su parte, Sagrario Pérez, directora general de la Cartera Básica de Servicios del SNS y de Farmacia del Ministerio de Sanidad, defendió la influencia que van a tener las TIC en la transformación de la relación entre la industria y la administración. En su opinión, es la llegada de las tecnologías de la información y la comunicación la que va a determinar ese cambio, en tanto que permiten “aumentar la transparencia”. Para ella, las nuevas tecnologías van a permitir monitorizar los resultados de la aplicación de los tratamientos, lo cual contribuirá a establecer condiciones más justas a la hora de financiarlos además de reducir costes asistenciales. “La historia clínica electrónica es algo indispensable para limitar la repetición de pruebas y el uso de las mismas de forma defensiva”, señaló.
En el foro también participaron Félix Rubial, director de Asistencia Sanitaria del Servicio Gallego de Salud; Gregorio Gómez, director de Asistencia Sanitaria de Zona de la Agencia Valenciana de Salud; José Soto, gerente del Hospital Clínico San Carlos; y Álvaro Arenas, profesor y director del área académica de SITI del IE Business School, los cuales defendieron el papel importante que están jugando las TIC a la hora de mejorar el modelo organizativo del SNS.
Rubial, por su parte, explicó el proceso de informatización que emprendió el Sergas en 2009, que ha permitido la integración de los ciudadanos, mejorar la prestación sanitaria a distancia, así como la dinamización de la comunicación entre los pacientes, los profesionales y los propios proveedores. Por otro lado, Gómez habló de los avances producidos en los ámbitos de la prescripción y la dispensación electrónica, y anunció que la última estará totalmente implantada para finales de año.