La meta prioritaria de la compañía británica es acabar con unas 200 enfermedades
La división de Enfermedades Raras contará con el apoyo de toda la compañía
Redacción
Londres
La división de Enfermedades Raras (ER) de GlaxoSmithKline (GSK) tiene vía libre para comenzar sus actividades, una vez presentados los objetivos y directrices de la unidad dirigida por Marc Dunoyer. Y las metas que se han establecido son, cuanto menos, ambiciosas. Concretamente, y según confirmó el propio Dunoyer, el fin principal será “acabar con una lista de 200 enfermedades prioritarias en las que se centrará la unidad”.
GSK Enfermedades Raras se creó el pasado mes de febrero, fruto de un acuerdo de la compañía británica con Prosensa y JCR. Ahora, en octubre, han llegado dos nuevos convenios que provocarán que el proyecto se ponga en marcha. Así, Dunoyer anunció la pasada semana la colaboración con Fondazione Telethon y Fondazione San Raffaele.
A partir de ahora, los profesionales de la nueva división de GSK deberán integrarse en “una comunidad muy unida”, como es la de enfermedades raras, con el fin de “trabajar con los pacientes, médicos y académicos para ampliar continuamente nuestros conocimientos”, prosiguió Dunoyer. Para el director de la unidad de Enfermedades Raras de la multinacional británica, lo ideal “es que creemos nuevos fármacos”. Eso sí, lo importante será sumarse “al peso del conocimiento científico en este campo”.
En la actualidad existen entre 6.000 y 8.000 enfermedades raras, por lo que Dunoyer anunció una concentración por parte de GSK que conlleve a una mayor posibilidad de éxito. En este sentido, mencionó que “si se toman las decisiones correctas al principio, al final el riesgo asociado al descubrimiento y desarrollo suele ser menor porque esas afecciones suelen estar bien definidas”.
Aunque la intención de GSK Enfermedades Raras es concentrar sus esfuerzos en un porcentaje de todas las patologías de este tipo que existen en la actualidad, otra de sus pretensiones es no trabajar con un número reducido de compuestos, de manera que se pueda “crear un amplio portafolio de moléculas dirigidas a un variado espectro de enfermedades raras”.