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Madrid
En época de vacas flacas, la congelación del presupuesto debe interpretarse como una prioridad gubernamental. Así lo cree la ministra de Ciencia e Innovación, Cristina Garmendia, que durante una jornada sobre Investigación y Ciencia organizada en el Senado, señaló que, según el borrador del proyecto de presupuestos para el año 2011, estima contar con unos presupuestos que se asemejan a los de 2010. La titular del Ministerio de Ciencia e Innovación quiso con estas declaraciones salir al paso de lo que había dicho un día antes, cuando habló de “recortes importantes” para su departamento en el proyecto de presupuestos.
La congelación implica, para Garmendia, que la política de I+D+i es todavía una “prioridad indiscutible” en el proyecto de José Luis Rodríguez Zapatero, ya que no estará sujeta al exigente marco legal de reducción de gasto público que previsiblemente tendrán que presentar todos, o casi todos, los departamentos.
¿Mismas críticas?
Pese a que el anuncio de la congelación presupuestaria puede ser mejor recibido que el de la reducción de fondos por parte de la comunidad científica, las críticas no están descartadas. Ciencia e Innovación fue uno de los ministerios más castigados en los presupuestos de 2010 y la repetición de los presupuestos implicará, cuando menos, una repetición de las críticas. Cabe recordar que nada más conocerse aquellos presupuestos dimitió Mariano Barbacid y se multiplicaron los manifiestos de científicos e investigadores.