Hay ocasiones en las que los traspasos de poderes dejan un vacío de poder transitorio. Sin embargo, en el caso de la Asociación para el Autocuidado (Anefp), la sintonía ideológica y estratégica de Rafael García Gutiérrez y Jaume Pey avecinan un soplo de aire fresco a la enérgica gestión de la asociación.
Pregunta. ¿Qué cambios se podrán observar tras el cambio de presidente y director general?
Rafael García Gutiérrez. Hay que tener en cuenta que el sector del autocuidado está en un momento crucial para su expansión, aunque la lástima es que sea la coyuntura económica y no los criterios sanitarios los que den el impulso. Para este momento no me cabe duda de que Anefp va a cambiar a mejor. Va a estar en unas manos que cumplen por completo todas las características que necesita esta asociación.
Jaume Pey. Para el SNS es crucial el sector del autocuidado. Dicho esto, sé que soy un privilegiado por el equipo con el que cuenta esta casa. Uno de los retos más importantes es manejar las posibilidades de las nuevas tecnologías para comunicar medicamentos no sujetos a prescripción.
P. ¿En qué estado se encuentra la publicidad en relación a los medicamentos no sujetos a prescripción?
R.G.G. La publicidad de medicamentos es buena, pero su control es un desastre. Es más, desde mi punto de vista es de cierta ilegalidad constitucional. Además, prima a alguien que sea deshonesto, ya que si eres capaz de sortear a la Comisión de Control Previo Sanitario te dan un papelito y quedas irresponsabilizado. En cambio, si se fuese responsable durante todo el proceso publicitario, se tendría más cuidado. En definitiva, proporciona menor protección al ciudadano.
P. ¿Anefp va a luchar por un sistema alternativo?
J.P. En el futuro inmediato tendríamos que caminar hacia un sistema en el que proporcione un control el mercado. Existen unas limitaciones claras de lo que podemos y no podemos decir, por tanto será la propia industria la que se autorregule evitando una competencia desleal. Debemos apostar por un control a posteriori y no a priori.
P. ¿Cómo valora la publicidad de los alimentos que alegan propiedades sanitarias?
R.G.G. Resulta que a la publicidad de los medicamentos que has tenido que demostrar calidad, seguridad y eficacia para poder comercializarlos se les delimita lo que pueden comunicar y, sin embargo, a los alimentos que sistemáticamente se atribuyen cualidades terapéuticas tienen una enorme libertad. ¿Por qué sí al control previo a los medicamentos y no a estos productos?
P. ¿Va a hacer Anefp un frente contra esta publicidad?
J.P. Nosotros competimos en inferioridad frente a estos productos. Anefp siempre ha sido beligerante ante esta situación, y vamos a continuar por el mismo camino. Si no lo hiciéramos sería muy difícil que las compañías confíen en lanzar productos para el autocuidado bajo este panorama.
P. ¿En qué situación está el proceso de precio notificado?
R.G.G. Es mentira lo del precio notificado. Lo que tenemos es un precio autorizado porque se solicita un precio y tienes que esperar a una resolución del Ministerio de Sanidad que te autorice la comercialización. Esta situación nos iguala a países como Grecia o Lituania y nos aleja de Gran Bretaña, Alemania o Francia. No puedo entender esta actitud de ningún gobierno y menos de uno que es soportado por un partido que dice ser de corte liberal. Además, lo del precio libre es mentira, es un precio que autoriza el mercado.
P. ¿Que se haría desde Anefp en el caso de que no se salven las trabas a la libertad de precios?
J. P. La primera vía que vamos a utilizar es el diálogo. Consideramos que el control de precios en productos desfinanciados es totalmente ilógico por dos motivos. Primero, porque los mecanismos del mercado garantizan unos precios bajos. Y segundo, porque a las compañías las pone en un callejón sin salida al no tener la posibilidad de recuperar un valor que tuvieron en el pasado. Esta estrategia de diálogo tendrá dos características, intentar entender la intencionalidad de este control de precios y caminar hacia el precio libre en un tiempo no superior a principios del año que viene. La normalidad que ha existido hasta ahora tiene que volver y si no es por la vía del diálogo será por la vía judicial que Anefp se reserva, porque tendremos que dirimir cuál es la diferencia entre una resolución administrativa y la Ley de Garantías. No entiendo cómo hemos caído en este atraso tras la experiencia de 30 años.
P. ¿Esperan una solución en el Real Decreto que se va a publicar sobre precios?
J.P. Sería fundamental garantizar en este real decreto que los medicamentos no sujetos a prescripción médica puedan continuar gozando de libertad de precios.
R.G.G. Si no habrá que recurrir ese real decreto por oponerse a una norma superior que es la Ley de Garantías.
P. ¿O modificar la ley?
J. P. Exacto. Estamos en un estado de derecho y no se pueden hacer cosas que legalmente y jerárquicamente no estén en consonancia.
P. ¿Cuántos procedimientos de switch se ha solicitado?
R.G.G. No lo sé, pero en mi opinión debería ser un cambio automático. La Administración ha argumentado como motivos para desfinanciar las mismas condiciones que exigen para que un producto sea no sujeto a prescripción médica. Por tanto, Anefp está luchando, y hay que admitir que la Aemps está siendo sensible, para que esto se haga en el menor tiempo posible.
P. ¿Se deben fomentar por parte de la administración los switches?
J.P. La Administración debe poner facilidades para que se cambie el estatus, ya sean voluntarios o promovidos por desfinanciaciones. Si pone facilidades a nivel de fórmulas e indicaciones, las compañías van a encontrar una guía para hacer estos switches. Si no tienen estas facilidades es prácticamente imposible que aborden el mercado por los costes.
R.G.G. Si no lo hacen así, van a conseguir el efecto contrario al deseado. Si la Administración siembra dudas sobre los medicamentos que han desfinanciado, los pacientes van a acudir al médico al que le receten el que cubre el SNS, por lo que no ahorrarán lo que esperan con la desfinanciación.
P. Y es que los productos para el autocuidado son necesarios para la sostenibilidad del SNS, ¿no?
J.P. Sí. Hay que sensibilizar a todos los actores y hacer didáctica en que apostar por el sector del autocuidado es hacer viable el acceso a medicamentos y tratamiento más caros.
P. ¿Cómo valora Anefp la situación actual de las marcas de gama?
R.G.G. No hay ninguna razón para que no se abra el camino a las marcas de gama. Nosotros propusimos que se pudiera utilizar la misma marca acompañada de prefijos o sufijos que garantizasen la no posibilidad de error en el dispensador y el consumidor. Cuando José Martínez Olmos era director de Farmacia se nos autorizó con un requisito: pasar durante un año un test. Tras siete años no ha habido ningún incidente y, sin embargo, no se autorizan totalmente. Eso es secuestrar la marca de una compañía, que es uno de los principales activos.
P. ¿Qué acciones quiere tomar Anefp para avanzar en este campo de las marcas de gama?
J.P. En estos momentos tenemos una guía para marcas de gama que facilita el camino, pero tenemos que avanzar un poco más en marcas con distinto estatus legal. Debemos desterrar el paternalismo que indica que no deben existir marcas que estén en la prescripción y que a su vez puedan ser utilizados para síntomas menores.
P. ¿Por qué es clave la receta electrónica para los MP?
R.G.G. La ausencia de la receta electrónica va en detrimento del uso de medicamentos no sujetos a prescripción y, por tanto, de los laboratorios que se dedican a ello. Además, para el paciente también es negativo, porque si no se usa la e-receta, puede que existan incompatibilidades entre un medicamento que tome el paciente y alguna afección que tenga sin que tenga conciencia de ello. Además, le hemos ofrecido al ministerio una colaboración para el seguimiento de la receta electrónica.
P. Para finalizar, Rafael ¿Qué virtudes señalarías de Pey?
R.G.G. Conocimiento, liderazgo y capacidad de adaptación.
P. ¿Y de García Gutiérrez, Jaume?
J.P. Es un líder, es valiente y persistente y amigo de sus amigos.