| domingo, 16 de noviembre de 2008 h |

Tiene razón Marina Geli cuando asegura que este sector —el sanitario en su conjunto— está muy acostumbrado a apretarse el cinturón. La sanidad es un sector que se autoevalúa, se compara, siempre se encuentra a la búsqueda obsesiva de la eficiencia, la mejor forma de gestionar los recursos y conseguir la mayor satisfacción del paciente. ¿Les suena esto? Hablamos de calidad y de mejora continua.

Los hospitales quieren hacerlo cada vez mejor, las consejerías de Sanidad trabajan en la línea de la calidad, garantizando sus servicios y los estándares precisos. Y las 14 CC.AA. que han presentado más de 300 candidaturas a los Premios Best In Class son una muestra más de todo esto. Le he escuchado decir a José Martínez Olmos que es la calidad de la prescripción lo que debe ser una línea estratégica a contemplar en los planes anunciados.

Se trata de una línea de trabajo que es consistente con la idea de poner al paciente en el centro del sistema sanitario ya que, ¿quién se beneficia de la calidad asistencial sino el paciente?

Algunas consejerías de Sanidad lo han convertido en una visión de la salud. Y hasta en un eslogan. La Consejería de Sanidad de Madrid firma —en su publicidad para que se utilicen mejor las urgencias sanitarias— con una frase que lo dice todo: “Calidad cerca de ti”. Sin duda una tranquilidad para los pacientes y para sus familiares.

Santiago

de Quiroga