Dr. Bartolomé Beltrán, director de Prevención y Servicios Médicos del Grupo Antena3
Anoto con interés la entrevista de Charo Tabernero al consejero de Sanidad de la Comunidad de Madrid, Juan José Güemes, en la revista del Colegio de Farmacéuticos de Madrid. Esa publicación que dirige con solvencia Luis González Díez, el secretario del colegio. Se produjo días antes de su comparecencia en el Foro de Nueva Economía. Como se ve en esta matizada y opinada entrevista, el consejero tiene en alta estima al colectivo de boticarios, aunque en la otra cara de la moneda se encuentra el discutido y discutible precio de referencia de los fármacos que tanto revuelo generan cuando se convierten en el centro de la dialéctica. Güemes ha dicho que “la población valora muy bien el trabajo de los farmacéuticos. Así, lo ponen de manifiesto las numerosas encuentras realizadas por el Consejo y lo valoramos desde la Administración”.
La Consejería de Sanidad, matiza el consejero, se enfrenta en este momento a múltiples retos, muchos de los cuales están muy avanzados en su consecución. Entre ellos, se encuentran el plan de infraestructuras para mejorar la calidad y la cercanía de la sanidad al domicilio de los madrileños, la reforma de los grandes hospitales, así como la concreción de la libre elección por la que cada madrileño pueda elegir dónde y por quién quiere ser atendido. Por otra parte, la Consejería está inmersa en que Madrid pueda aprovechar toda su capacidad docente para que salgan mayor número de médicos de sus facultades, y en potenciar la investigación.
Sobre las farmacias le dijo a Tabernero que “los farmacéuticos de oficina de farmacia tienen un papel muy importante en la educación sanitaria de la población. De hecho, se han mantenido reuniones con el Colegio Oficial de Farmacéuticos para informar de las actuaciones previstas y se ha entregado documentación sobre la gripe A para su distribución a través de las oficinas de farmacia”.
Para Güemes “la receta electrónica supone para el paciente un procedimiento más seguro, ya que disminuye los errores de prescripción y dispensación y, a su vez, es más eficiente porque evita visitas burocráticas innecesarias y relaciona estas visitas con las necesidades clínicas, además disminuye la ‘dispensación anticipada’ en pacientes crónicos. Del mismo modo, aumenta el conocimiento sobre el uso adecuado de los medicamentos. El paciente no sale de la consulta con una receta sino con una hoja de información sobre su tratamiento”.
El Colegio de Farmacéuticos y la consejería tienen un plan de colaboración doble. Por una parte, y fundamentalmente, aumentar la calidad de la prestación farmacéutica que se ofrece al ciudadano. Por otra, reconocer a las oficinas de farmacia lo que son: una parte muy importante del sistema sanitario madrileño. Son muchos los proyectos de colaboración pero quizás el más ambicioso y pionero a nivel nacional e internacional es el Programa de Atención al Mayor Polimedicado, en el que hoy por hoy están incluidos más de 70.000 ancianos de la comunidad. Seguro.