Después de que hayan pasado más de seis años desde que viese la luz la Ley de Garantías, el Real Decreto de Distribución, uno de los desarrollos legislativos pendientes de esta, podría ser aprobado antes de que finalice este año. Al menos, esta es la impresión que desde la patronal española de la distribución de medicamentos sacaron después de mantener un encuentro el pasado 24 de septiembre con representantes del Ministerio de Sanidad. Una reunión en la que, según fuentes de la patronal consultadas por EG, las autoridades sanitarias informaron que el texto que se aprobará finalmente tendrá ligeras modificaciones respecto al proyecto que se dio a conocer desde el ministerio el pasado mes de julio.
Sobre este particular, desde el sector de la distribución de medicamentos en España esperan que una de estas ‘modificaciones’ que contendrá el Real Decreto de Distribución sea la de reconocer una de las reclamaciones históricas de este agente de la cadena del medicamento: que se ponga negro sobre blanco el derecho al suministro por parte de los laboratorios de las distribuidoras. “Esperamos que el texto definitivo del Real Decreto de Distribución reconozca este derecho, que es algo fundamental para que las distribuidoras de medicamentos que operan en España puedan realizar su labor”, precisaron fuentes del sector.
A este respecto, cabe destacar que el derecho a suministro por parte de los laboratorios farmacéuticos estaba reconocido en un primer borrador de Real Decreto de Distribución, elaborado por el Ministerio de Sanidad que entonces dirigía Leire Pajín y que se publicó en julio de 2011. Sin embargo, ese proyecto fue retocado por el Gobierno actual y en el nuevo proyecto, publicado el pasado mes de julio, desapareció el reconocimiento de ese derecho al suministro.
En este sentido, durante el trámite de audiencia de este real decreto desde la patronal de la distribución se presentaron alegaciones encaminadas, principalmente, a que el texto que finalmente salga del Consejo de Ministros reconozca esta reivindicación. “El derecho al suministro es una de las piedras angulares del actual modelo farmacéutico y sin él será difícil poder garantizar el acceso de todos los ciudadanos y en idénticas condiciones a todos los medicamentos”, precisan desde el sector. Y es que, desde la distribución se insiste en que “se trata de un derecho del paciente, incluido en la Ley de Garantías, que todavía no ha sido desarrollado y que se debe preservar”.
Comercio paralelo
Uno de los argumentos esgrimidos por las farmacéuticas en contra de que se reconozca este derecho es que el mismo podría generar, según Farmaindustria, “un indeseable aumento del comercio paralelo. Sin embargo, desde la distribución se negó este extremo, ya que, tal y como precisan, “no abre ninguna nueva puerta al comercio paralelo sino todo lo contrario, lo limita” al tener que comunicar las importaciones.