El Hospital Clínico de Madrid es, desde el pasado 9 de octubre, el primer centro del mundo en implantar un nuevo stent, el Resolute Onyx, una versión mejorada del ya conocido Resolute Integrity. En realidad, indica Eulogio García, cardiólogo intervencionista de este hospital y el responsable del éxito de la operación, se colocaron “dos stent en la arteria descendente anterior y tres stent en la coronaria derecha, que estaba ocluida”.
Para García, la principal ventaja del dispositivo es, sobre todo, su nuevo sistema de navegación, que permite desplazar el stent a “cualquier lesión de cualquier sitio del árbol coronario”, lo que lo hace especialmente útil en lesiones poco accesibles como, por ejemplo, continúa García, “vasos muy tortuosos, con mucho calcio y pocas curvas”.
Además, si bien la composición externa del stent es la convencional, de cromo-cobalto, la composición interna, explica este profesional, es una combinación con platino que “al ser un metal con un peso molecular más bajo, hace que el dispositivo sea todavía más flexible”. Dos características que hacen, para este cardiólogo intervencionista, que esta nueva versión sea “sorprendentemente navegable”. Otra de las ventajas de la nueva composición del núcleo del stent es su radiopacidad, con lo que también mejora mucho la visibilidad durante la intervención.
En cuanto a los resultados, este cardiólogo explica que no existen ensayos clínicos en humanos, ya que “las drogas y el polímero del stent, así como la plataforma de navegación, son las mismas que las del Resolute Integrity”, por lo que no era necesario. “Se pueden aplicar muchos de los resultados de eficacia clínica del Resolute Integrity al Resolute Onyx”, asegura García, que sí señala la realización de ensayos clínicos en modelos murinos. Medtronic, compañía comercializadora, fue quien seleccionó a este hospital como el idóneo para realizar esta primera intervención.
En un comunicado, la compañía señala que el stent está ya disponible en los países que reconocen el marcado CE, pero que todavía no cuenta con la aprobación para su uso en Estados Unidos. En el marcado CE, se incluye ya información sobre la terapia de doble antiagregación plaquetaria a un mes de seguimiento.