Antonio Nieto Director de El Global | viernes, 13 de mayo de 2016 h |

Las últimas decisiones de GSK en cuanto a transparencia y patentes están cogiendo un tanto descolado al sector. Las medidas que va a implementar la compañía no hacen sino responder a lo que demanda la sociedad. La industria farmacéutica tiene como principio eso básicamente, satisfacer las demandas de la sociedad con sus productos y servicios. El problema es que no se sepan interpretar esos movimientos aperturistas tanto de GSK como del resto de compañías de la industria personalizados en la puesta en común a partir de junio de las transferencias de valor que realizan las compañías del sector. Hay muchos actores con las uñas afiladas esperando ese momento y ante eso la industria innovadora tiene que estar preparada para, sobre todo, mantener esa postura aperturista y clara. Responder con hechos, con el valor que aportan esos hechos y con la necesidad de demostrar la aportación a la sociedad más allá de los medicamentos. Pero no va a ser fácil y vienen curvas. En cualquier caso, la decisión no tiene marcha atrás.

Vienen curvas también en las históricas reclamaciones de la farmacia en cuanto al cobro de intereses de demora. Europa, en su histórica demostración de falta sensibilidad, vuelve a colocarse del lado de la Administración y asesta un golpe a la línea de flotación de los farmacéuticos impagados. Inasumible e inadmisible la posición de la Abogada General del Tribunal de Justicia de Luxemburgo, Eleanor Sharpston. 60 millones de euros son muchos, demasiados millones. Jurídicamente es verdad que no hay nada que reprochar aunque la cláusula objeto de la resolución es claramente abusiva y es ahí donde se esperaba mayor comprensión por parte de la abogada general . Pero bueno, no deja de ser un importante revés para los farmacéuticos que se acogieron al Plan de Pago a Proveedores básicamente para poder subsistir, para obtener lo que es suyo. Ahora solo queda esperar a la sentencia del tribunal.

La resolución de la Abogada General del TJUE es inadmisble
e inasumible, 60 millones son muchos millones