| domingo, 15 de marzo de 2009 h |

JUAN NIETO

Barcelona

Pregunta. Infarma, un referente para la farmacia europea, ¿no?

Respuesta. Totalmente. Ha ido creciendo porque no sólo es un referente ferial, que es importante, sino que hay una parte de organización profesional en la que se tocan temas de gran calado, nacionales e internacionales. Y va creciendo. De hecho, la mesa redonda que moderé el miércoles, “Modelos profesionales en la farmacia europea”, fue de cartel internacional con ponentes de toda Europa. El nivel está siendo espléndido.

P. Y con la sentencia de Luxemburgo sobre el ‘caso italiano’ a la vuelta de la esquina.

R. Sí, pero me temo que estas circunstancias se van a convertir en una constante, porque las implicaciones de las directivas europeas o cualquier sentencia que venga de Europa es muy importante para la forma de trabajar, no sólo para la oficina de farmacia sino para el profesional farmacéutico. Y nos está afectando de tal forma que será una constante, no un tema coyuntural.

P. ¿Motiva esto una transformación de las organizaciones profesionales?

R. Sí, por supuesto. Por ejemplo, el Consejo ha evolucionado hacia una nueva forma de trabajar, tanto a nivel autonómico, sobre el respeto a la política que está en manos de las consejerías y de nuestros compañeros de los consejos autonómicos y de los colegios, como a nivel nacional, con una evolución hacia una visión más europea e internacional del mundo de la farmacia.

P. Lo que se demuestra es que, pese a la crisis, la farmacia española goza de buena salud.

R. Marina Geli, que es una mujer que tiene las ideas muy claras, decía que en un contexto de crisis en el que estamos inmersos son los congresos y las jornadas sanitarias, como esta farmacéutica, los únicos que no sólo se mantienen sino que crecen tanto en congresistas como en participación de la industria. Y es donde se refleja mejor la necesidad de la regulación de la sanidad.

P. Y estas jornadas son posibles sobre todo en los países con modelos regulados, ¿no?

R. Claro, porque los farmacéuticos de los modelos liberalizados, por desgracia, tienen poco que aportar, ya que se han convertido en meros dispensadores de medicamentos. Y lo digo con el máximo respeto. Aquí, la labor del farmacéutico y su implicación profesional va cada vez a más. Se genera más responsabilidad sobre el farmacéutico y se observa en procesos como la e-receta, la AF, la formación continuada…

P. ¿Es esta responsabilidad del farmacéutico sobre la que se asienta el éxito de este congreso?

R. Sí, porque demuestra que el farmacéutico es un agente imprescindible dentro del sistema sanitario.

P. ¿Es inviable ir hacia un modelo común europeo en farmacia?

R. No es ni inevitable ni imposible. Hay que ir hacia modelos coordinados, en los que se respeten las idiosincrasias nacionales pero que generen la libre circulación de pacientes y profesionales, que es una necesidad.