El pleno del Congreso ha aprobado, con 208 votos a favor, 9 en contra y 102 abstenciones, la propuesta de la Comisión de Sanidad y Servicios Sociales de crear una Subcomisión para el análisis de los problemas estructurales del sistema sanitario y de las principales reformas que deberán acometerse para garantizar su sostenibilidad.
El único grupo que, tras los recortes sanitarios aprobados en el Real Decreto-ley, ha dado su voto negativo a esta subcomisión es la Izquierda Plural. “Esta es una propuesta cínica, porque no hay pacto”, explicó su portavoz de Sanidad, Gaspar Llamazares. El grupo socialista finalmente se ha decantado por ejercer una “abstención vigilante” al grupo mayoritario. Por su parte, el grupo parlamentario de CiU, impulsor de la iniciativa, ha condicionado el futuro de esta subcomisión a la disposición a llegar a los consensos que no ha sido posible alcanzar con la reforma sanitaria. “Si en esta subcomisión el acuerdo no se diera por parte del grupo mayoritario, hablaríamos de abandonar la comisión”, ha declarado su portavoz de Sanidad, Concepció Tarruella.