El CISNS está a la espera de Garmendia y la financiación

c. r.

Madrid

Dos partidas por valor de 33 millones de euros a repartir entre las comunidades autónomas y la financiación, a cargo del Fondo de Cohesión, del diagnóstico genético preimplantatorio. Es el balance de un Consejo Interterritorial “muy técnico y poco político”, según los consejeros de Sanidad, y marcado por dos grandes ausencias: la del debate de la financiación sanitaria y la de la ministra de Ciencia e Innovación, Cristina Garmendia.

“Un problema de agenda”, que el consejero de Sanidad de Madrid, Juan José Güemes, atribuyó a la ‘brecha’ que a su juicio existe entre los titulares de Sanidad e Innovación, impidió a Garmendia explicar sus planes de I+D biomédica. A la titular de Ciencia se le acumula el trabajo en este Pleno, pues a esta comparecencia se le suma ahora la petición de la consejera canarias Mercedes Roldós de que acuda también a hablar sobre la necesidad de médicos especialistas y del incremento de plazas universitarias para cursar Medicina y Cirugía.

Pero el Consejo Interterritorial tendrá que seguir esperando la presencia de Garmendia. No está previsto que acuda a la próxima reunión del Pleno, que sí abordará, en cambio y de manera monográfica, el Pacto por la Sanidad. Será el 3 de junio en Mérida, según confirmó en la reunión el ministro de Sanidad, Bernat Soria, para consuelo de los consejeros, algunos de los cuales habían trasladado al ministerio su preocupación acerca de las consecuencias que puede generar el retraso en la reforma del modelo de financiación autonómica. “De no sentar ya las bases de financiación, no habrá tiempo material —administrativamente hablando— para que en los próximos Presupuestos Generales del Estado podamos contar con un reparto más equitativo y real”, dijo Mercedes Roldós.

Transferencias directas

No fue, sin embargo, la única mención que se escuchó en el Pleno en relación a la financiación sanitaria. El reparto de los fondos que se aprobaron para estrategias de salud, para enfermedades emergentes, reemergentes y sida y para el uso racional de los medicamentos, permitió a la consejera canaria de Sanidad elevar la propuesta de que la distribución de fondos estatales no se realice vía convenios o subvenciones, como quiere el Ministerio de Sanidad, sino mediante transferencias directas a las comunidades autónomas. El estudio de la propuesta, a la que se sumó Andalucía y que contó además con el asentimiento de otras autonomías, no contó con la negativa del ministerio de Soria.

Mientras, el PSOE acusó a las comunidades populares de silenciar con sus críticas los acuerdos alcanzados en el Pleno. Uno de los más importantes fue el reparto de 27 millones de euros para impulsar en las comunidades autónomas un programa que mejore la calidad de la atención que actualmente se presta a pacientes crónicos y polimedicados y que, en definitiva, resultará en un descenso en las visitas a Urgencias.

“Hay que trabajar más en la prescripción farmacéutica”, aseguró Soria al término del Pleno. Por ello, la contratación de profesionales sanitarios cualificados en el manejo de medicamentos, en particular farmacéuticos, será la vía para revisar de forma sistemática la efectividad de los tratamientos de los pacientes. En este sentido, Soria se refirió a que esta dotación permitirá generar empleo de calidad con la contratación de unos 500 profesionales a lo largo de este año.

En cuanto a la posible incorporación en la cartera de servicios, el ministro aseguró que la financiación del diagnóstico genético preimplantatorio, técnica que se llevaría a cabo a través de centros de referencia, podría comenzar en el plazo aproximado de un año.