La propuesta de directiva de la CE sobre utilización de animales con fines científicos amenazaba con la deslocalización de la I+D en todo el ámbito de la Unión Europea
| 2009-05-09T18:15:00+02:00 h |

La semana pasada el Parlamento Europeo dio el penúltimo paso antes de la definitiva aprobación por parte del Consejo de Ministros de la UE en la actualización de la Directiva 86/609, relativa a la protección de animales utilizados con fines científicos. Como no podía ser de otro modo, el Europarlamento ha matizado algunas cuestiones y cambiando directamente otras el texto elaborado por la Comisión Europea que había alarmado a gran parte de los científicos y compañías investigadoras instaladas en el Viejo Continente.

Desde que hace algo más de seis meses salió a la luz el proyecto de directiva se han sucedido numerosos eventos, charlas y jornadas dirigidas a evaluar las consecuencias que para la investigación en general y farmacéutica en particular tendría la directiva. La respuesta casi unánime era que se expulsaría a las compañías investigadoras del ámbito de la UE pero que no se conseguiría acabar con la utilización de animales en investigación ya que, por ahora resulta imprescindible su uso.

Con todo ello, el peligro de deslocalización era una realidad palpable y este factor ha sido decisivo para que una amplia mayoría de parlamentarios haya querido rebajar las exigencias iniciales. Al final, el texto resultante obligará, como no puede ser de otro modo, a modificar algunos elementos tradicionales de la investigación con medicamentos. Habrá que modificar algunos protocolos, adaptarse a las nuevas exigencias y criterios de utilización y, sobre todo, profundizar en la implantación de las 3Rs (Reducción, Refinamiento y Reemplazo) ya que el futuro está en su cumplimiento estricto. Pero hoy, todavía no.

El Parlamento Europeo y especialmente los parlamentarios de las comisiones de estudio que han analizado los textos e incorporado numerosas enmiendas han hecho viable la nueva directiva. Con ello permitirá que la investigación biofarmacéutica entre otras muchas se mantenga en el seno de la UE ayudando a potenciar la I+D como elemento diferenciador de la economía de la Unión y permitiendo que la obtención de nuevos medicamentos siga siendo una realidad. Por fin se ha impuesto la sensatez.