La fijación de precios de los medicamentos en España es uno de esos procedimientos de los que mucho se habla y poco se sabe, especialmente porque lo que indica la Ley de Garantías es tan vago que puede interpretarse de cualquier modo y cada caso, es único. Si hay algo que está claro es que el precio en España no se determina aquí, sino que viene prefijado en función de las decisiones que tomen los griegos, franceses o italianos. Son ellos, por tanto, los que reconocen o no la innovación de los nuevos medicamentos. Nosotros como mucho modulamos su decisión.
Y esta realidad trae asociada un problema que, cada vez, está apareciendo con mayor frecuencia en nuestro país, aunque desde Sanidad se diga que no hay ninguna instrucción en este sentido: las presentaciones de un medicamento pueden tener el mismo precio aunque contengan dosis muy diferentes.
Una de las razones para que esto ocurra es que en algún país europeo se haya otorgado el mismo precio a las diferentes presentaciones. Con ello, y a la búsqueda del mayor ahorro para el sistema, la Comisión de Precios los copia.
Pero lo que no se tiene en cuenta es que, en nuestro país las repercusiones que estas decisiones tienen son mucho más relevantes que el mero hecho de no reconocer el coste de un determinado principio activo o hacer caso omiso a las dificultades galénicas que puede conllevar. Y es que es fijación de precios del medicamento original va a determinar de forma clave el precio de referencia que, cuando se formen los conjuntos, tendrá dicho fármaco.
No es lógico, y así lo ven tanto Farmaindustria como Aeseg, que la dosis pueda dejar de tener importancia a la hora de fijar el precio de un medicamento y que, en cambio, para establecer los precios de referencia sea el elemento fundamental de cálculo.
Si lo que hasta el momento han podido ser excepciones se acentúan o se convierten en una norma, es posible que en muy poco tiempo nos encontremos con que las presentaciones de dosis bajas desaparecen del mercado por su baja rentabilidad o que no se solicite la autorización para las presentaciones de dosis altas. En cualquiera de los casos se demostrará que tener en cuenta la dosis para fijar el precio, sí es importante.