La primera semana de la aplicación del pago de un euro por receta en Cataluña registró algunas incidencias informáticas. Pilar Gascón, secretaria del Consejo de Colegios de Farmacéuticos de Cataluña analiza para EG estas circunstancias.
Pregunta. Ha pasado ya la primera semana de la implantación de la tasa. ¿Ha pasado lo peor?
Respuesta. Se han sufrido incidencias informáticas que han dificultado mucho el trabajo de los farmacéuticos. En estos momentos parecen resueltas pero seguimos alerta para ver cómo se desarrolla esta semana y seguirá en marcha el servicio de atención telefónica a incidencias que se habilitó con la entrada en vigor de la medida para resolver las dudas que surgieran en las farmacias.
P. Se temían casos de insumisión. ¿Se cumplieron los temores?
R. Se han dado algunos casos puntuales, los usuarios han pagado la tasa sin incidencias.
P. ¿Alguien se negó a rellenar el impreso identificativo?
R. No tenemos constancia. En ese caso, la farmacia no le habrá podido dispensar el medicamento y no ha quedado registro.
P. Al boticario se le ha colocado en una situación complicada respecto al paciente, ¿no?
R. Teniendo en cuenta la relación de confianza que tenemos los farmacéuticos con los pacientes, gracias a nuestro rol sanitario, desde el primer momento manifestamos que cobrar este tipo de tasas no se ajustaba a nuestra labor profesional. Somos agentes sanitarios y no recaudadores de impuestos.
P. Mala imagen.
R. Por suerte, nuestra labor sanitaria pesa más que la relacionada con este tipo de medidas. Los usuarios también saben que estamos obligados a cobrarles por una ley cuya aplicación no nos satisface.
P. Las farmacias están ahora más preocupadas por este tipo de temas que por otros meramente farmacéuticos, ¿no?
R. Lo urgente no debe hacernos perder de vista lo importante. Hay que resolver los problemas que se nos plantean en el corto plazo, pero no dejamos de pensar en el futuro a largo plazo y en lo que es la esencia de nuestra profesión. Temas como la cartera de servicios, que nos permitan avanzar como profesionales no deben dejarse de lado.