El nuevo Sistema de Precios de Referencia (SPR)_que prepara el Ministerio de Sanidad amenaza con dar una vuelta de tuerca más a la viabilidad del sector en aspectos muy relevantes. Son muchos y variados los aspectos que el texto, actualmente a la espera de dictamen del Consejo de Estado, contiene y que puede perjudicar de manera importante al sector.
Empezando por el nuevo umbral, pasando por los periodos de convivencia, para llegar a las referencias de precios con otros países de la UE o las revisiones automáticas de precios al cumplirse diez años de comercialización, cada una de ellas supone un golpe en la línea de flotación del sector.
El umbral mínimo reducirá su cuantía. Pasará de 2 euros a 1,6 a PVL. Pero ahora, además, no será una cifra fija. El nuevo real decreto establece que se calculará en función del precio medio por receta del año anterior. El proyecto establece que será el 15 por ciento del mismo. Algo que conlleva un futuro negro ya que la evolución de la innovación y las medidas administrativas hacen que los nuevos productos se envíen al ámbito hospitalario. Esto hace que, el gasto medio por receta en Farmacia no tenga ningún elemento que tire hacia arriba del precio. Y por el contrario, el propio SPR hace que baje. De este modo, el umbral mínimo, baja y hace que esa bajada signifique una nueva reducción el año siguiente. Una retroalimentación perversa que en vez de sujetar el precio, lo baja.
Por otro lado, el nuevo SPR establece unos plazos de convivencia de precios muy cortos que no hará más que devaluar los stocks de distribución y farmacia e incrementar las posibilidades de desabastecimiento. La farmacia se podría encontrar con que solo tiene diez días para sacarse de encima todo el stock a precio antiguo o, de lo contrario, tener que asumir unos costes por devaluación. Algo inviable.
Además este nuevo real decreto afecta de modo muy significativo al cálculo de los precios de referencia. Ya no será necesario que se bajen los precios en nuestro país para que el precio de referencia baje. Increíblemente, los precios de otros países podrán ser considerados como precios de referencia en España. Además, y por otro lado, aunque será necesaria la existencia de genéricos para establecer los conjuntos. Si un medicamento tiene más de diez años en el mercado pero no tiene genérico, se habilita un procedimiento nuevo para bajarle de forma individual el precio.
Lo dicho, este nuevo SPR da una vuelta de tuerca muy importante al sector. Parece que los gestores no tienen en cuenta que el gasto per cápita en Farmacia ha bajado en los últimos once años 13 euros. Ya está bien.
El método de cálculo del umbral mínimo es perverso, en vez de sujetar el precio, lo baja
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