| viernes, 07 de noviembre de 2014 h |

El consejero de Salud de la Generalitat de Cataluña, Boi Ruiz, aprovechó el XX Encuentro del Sector de la Tecnología Sanitaria para realizar un análisis de la relación actual entre este sector y los gestores y avanzar la evolución que desde su punto de vista sería deseable. Ruiz comenzó su discurso reconociendo la dificultad del sector para orientar sus estrategias “si nosotros no orientamos nuestras políticas sanitarias”. En este sentido, aclaró que la posición de la Generalitat es focalizarse en las políticas proactivas sin descuidar las reactivas. “No se trata de paliar accidentes, si no de evitarlos, aunque también tenemos que tener elementos para tratar los que se produzcan”, explicó.

Entre las recetas que le propuso el consejero al sector destaca el cambio de paradigma en las relaciones que les unen, de tal forma que en lugar de comprador-proveedor se pase a un vínculo de partenariado. “De esta forma vosotros sabréis qué necesitamos nosotros y localizareis vuestros esfuerzo en el desarrollo de esos servicios en lugar de en innovaciones que quizá no vean la luz en el mercado”, dijo. Asimismo, recordó que la innovación que más valora la Administración es aquella que posibilita hacer más con el mismo dinero. “Durante los próximos años las partidas presupuestarias no van a cambiar porque, una vez hagamos frente al pago de los intereses de la deuda, habrá que hacer esfuerzo por reducirla, así que en el mejor de los casos el dinero que tengamos en la caja se mantendrá”, avisó.

Otro de los problemas que existen actualmente en el panorama de la gestión sanitaria es la referente a la Ley de Contratos Públicos. Martín Blanco, secretario general de Planificación y Evaluación Económica de la Junta de Andalucía, señaló que existe un terreno muy farragoso para implantar las innovaciones. “Esta ley nació como un mecanismo de control a posibles casos de corrupción y a la vista está que no ha funcionado tan bien como debería”, afirmó. A pesar del exceso burocrático que, según manifestó Blanco, tiene esta legislación, indicó que tratan “de darle un giro y nos estamos interesando por fórmulas como la Compra Pública Precomercial”.

Otro de los problemas que se señalaron durante el debate que mantuvieron ambos gestores fue la escasa planificación económica que existe en el sector sanitario a medio plazo. Ruiz precisó que los presupuestos, al ser anuales, no dejan “invertir ahora para ahorrar después”. Este aspecto dificulta la previsión de la industria de tecnología sanitaria, pero tanto Ruiz como Blanco se esforzaron en repetir que “aquel servicio que se ofrezca y permita que al final del proceso se ahorren recursos económicos siempre será bienvenida.

Tras el debate que mantuvieron Ruiz y Blanco, Margarita Alfonsel, secretaria general de la Federación Española de Empresas de Tecnología Sanitaria (Fenin), reconoció que “hay que buscar modelos más eficientes porque hay que modernizar el sistema”. Ante sus asociados, Alfonsel recordó que su sector es un socio estratégico desee sistema, por lo que hay que dejar atrás “la imagen de proveedores”.

Por otro lado, aseguró que el sector debe focalizarse hacia las herramientas de e-salud. “Dan un gran resultado tanto a las empresas que lo desarrollan como a la Administración”, concluyó.