La asistencialidad es el camino de la farmacia, como se suele escuchar en los foros profesionales. Aunque también en el contexto académico se tiende a fomentar la formación en servicios asistenciales, así como a fijarse en las experiencias internacionales. De hecho, este tema ha tenido cabida en la segunda jornada del IV Congreso de Educación Superior en Ciencias Farmacéuticas (Edusfarm), que se está celebrando en Pamplona hasta el 22 de junio.
En esta línea, Reino Unido es un referente en servicios asistenciales, así como en su integración en la formación de los farmacéuticos. Según la experiencia de Helena Sáiz de Vicuña, que realiza un posgrado en el University College of London, en España “no estamos igual de preparados. Después de 5 años de carrera, no sabíamos aplicar los conocimientos, por ejemplo, al explicar cómo usar un inhalador”, manifestó. Así, planteó que en el país británico se desarrolla un sistema de evaluación por competencias (ECOE).
Por otro lado, Leire Arbea, de la Facultad de Medicina de la Universidad de Navarra, también expuso una herramienta que ya se está implantando para evaluar a los alumnos, y que aunque supone tiempo y esfuerzo aunque “es muy útil si se hace con regularidad”. Asimismo, Mariam March, de la Universidad de Barcelona, expuso su experiencia y destacó que “para que los tutores participen y estén motivados con la evaluación, nos ayuda la comunicación, decirles que tienen un rol y que se profesionalizan para ser docentes”.
Perfil para el empleo
La prestación de servicios y la capacidad de comunicación tiene mucho que ver con los perfiles más demandados por los empleadores, tema de la segunda mesa redonda del congreso Edusfarm. Representantes de empresas farmacéuticas como Cinfa y Lilly, de una start up y del Colegio Oficial de Farmacéuticos de Navarra explicaron qué valoran a la hora de contratar.
La situación ha cambiado en los últimos años, según explicó Francisco Aranda, director de Calidad y Regulatory Affairs de Cinfa, destacó que a un trabajador “se le contrata por las aptitudes y se le echa por las actitudes”, así que apostó porque desde la universidad se prepare a los alumnos “más bien para que no los echen”. Asismismo, para la gerente de Recursos Humanos de Lilly, Belén Hernando, más que la experiencia profesional, buscan candidatos con experiencia personal, “buscamos personas con valores, cogemos a gente sin ninguna experiencia, alguien que tiene integridad y valores, es un factor diferenciador”, reconoció. Aunque también valoran cuestiones como la movilidad geográfica o el dominio “real” del inglés.
Para Marta Galipienzo, presidenta COF de Navarra, “es necesario que los candidatos conozcan los nuevos medicamentos biológicos, que antes no se estudiaban y debemos empezar a protocolizar y registrar”. Además, reconoció que “lo difícil es valorar las aptitudes, las actitudes de dan por hecho”. Así, hizo un llamamiento a los decanos para apostar por una “titulación específica en Farmacia Comunitaria”. Finalmente, sobre el perfil del candidato manifestó que “buscamos a un farmacéutico vocacional, que se convierta en el farmacéutico de cabecera del paciente”.
Finalmente, Maite Agüeros, directora de InnoUp Farma, apuntó que las nuevas empresas requieren perfiles muy flexibles e innovadores, “la formación ya la damos por supuesta. Ahora buscamos esas competencias que no son fáciles de ver, la primera es la capacidad de adaptación”, apuntó.