c. r.
Madrid
Poco más dijo la ministra de Sanidad, Política Social e Igualdad, Leire Pajín, sobre el sistema de unidosis, salvo que ahorrará 300 millones anuales. Sin embargo, los beneficios económicos de este sistema no están claros. Así lo cree Aeseg, que tampoco ve clara la necesidad de modificar la adecuación actual de los envases.
Desde el punto de vista de la patronal de los genéricos, la adecuación de los envases es perfecta porque así lo avala y así lo ha pedido la propia Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (Aemps). “Nosotros no generamos en la industria envases de 28 comprimidos porque sea nuestro capricho, sino que los generamos para tratamientos crónicos porque así nos lo ha pedido la Aemps y así lo han demandado las agencias europeas. Por eso entiendo que este tipo de medidas no tendrá ninguna relación con los tratamientos crónicos”, explicó Ángel Luis Rodríguez de la Cuerda, director general de Aeseg.
Respecto a tratamientos agudos la postura no varía. En el caso de los antibióticos Aeseg recuerda, por ejemplo, que la Organización Mundial de la Salud recomienda que el tratamiento mínimo sea de tres o cuatro días y en el mercado existen, según la patronal, envases que se adecuan a esa duración. En el caso de los analgésicos, Rodríguez de la Cuerda transmite otra consideración: “Hoy un envase de ibuprofeno de 40 comprimidos tiene un precio de 1,92 euros. ¿Qué ahorro económico vamos a producir cuando la prescripción a dispensar por el farmacéutico sea de cuatro o cinco comprimidos? Máxime si a todo ello se añade la complicación logística y operativa que conlleva”.